Tiempo

desesperada

Entonces Victoriano lo vio. No era momento de reclamos, aunque estuviera enojado por el actuar de Inés, no entendía porque no le aviso esto no era algo que pudiera vivir sola, pero era terca le había costado tanto convencerla de que no manejara mas y se quedará en la finca, por lo menos hasta la llegada de Emiliano, que en realidad lo analiso y era obvio que no le iba a pedir nada a nadie nunca

En esa habitación solo había dos personas destruidas por las circunstancias, intentando aferrarse a algo parecido a un sueño que los mantenía fuera de la realidad, que los alejaba del dolor que minutos, días y años más tardes vendría, es que estar tan unidos en este pedacito de cielo fue una probada de todo lo que podrían tener, pero no, el egoísmo y el dolor se los impediría. Había algo más grande que los tenía presos en un círculo de dolor constante...

Uno se pone a pensar, ¿qué es la felicidad? ¿La felicidad es un auto? ¿Una casa? ¿Salir de vacaciones? ¿Vivir Bien? Trabajamos toda la vida para tenerlo, pero ya se pararon a pensar, son felices encerrados en una oficina ocho horas o más por día, son felices redactando informes hasta los fines de semana, todo por tener un auto del año, ropa de marca y salir dos semanas cada año de vacaciones. ¿Cuantas veces resignamos o dejamos en segundo plano al amor?. en cuantas ocasiones frenamos a ver a nuestro alrededor, nuestros padres, hijos, hermanos.
Y ahí lo tenés, destructor silencioso, arma de demolición masiva, no lo podes ver, no lo sentís y casi no lo notas pero el día que abrís los ojos está ahí el tiempo, que destruye todo a su paso, que desordena nuestras vidas y nos va convirtiendo en sus esclavos, en prisioneros rogando por migajas que sabemos nunca van a llegar...

Inés respiro profundo cuando sintió a su niño en el pecho y se largó a llorar, Víctor le hacía tanta falta, mucha falta, se sentía más sola que nunca, solo quería poder regresar el tiempo y verlo, una vez más quizá eso sanaría su alma, quería Regresar a esa mañana en la que entraba a su habitación envuelta en una simple sabana con los ojos aguados y el test positivo en la mano, necesitaba hacerle justicia a sus ojos y verlo otra vez, instalarse y quedarse a vivir como si fuera un bucle temporal en el instante en el que Victor salto de la cama la tomo por la cintura y giro por toda la habitación con ella en brazos, besos infinitos, mimos y caricias esa indudable sensación de alcanzar el cielo.
Vivir por siempre en esa hora antes de que se fuera a trabajar, el sol era tan brillante, brillaba más que nunca o fue su percepción, quizá era por que su deseo más profundo se había cumplido; seria MADRE, madre con el hombre que le había enseñado a amar otra vez, y era perfecto era la burbuja perfecta.
Mientras recordaba lágrimas caían y caían sin parar porque ella aún lo amaba, como ese dia, como tantos dias. El llanto de Emiliano la saco del sueño; lo gris del quirófano la desespero, y por primera vez en los últimos seis meses se sentía absolutamente devastada y sin rumbo aunque no se permitió llorar.

Busco a Víctor con la mirada, aún tenía la esperanza de verlo, se sintió extremadamente idiota cuando no la encontro, y no era la primera vez que le pasaba aún seguía buscándolo con las manos a su derecha cuando despertaba, en la ducha a las 6 de la mañana o a la hora de almorzar cuando esperaba que se abriera la puerta y entrara, renegando con una mala guardia o con un ramo de flores celebrando alguna fecha que inventaba para que Inés no lo regalará por gastar dinero en flores para ella, pero no estaba, solo tenía en ese lugar su patrón, y lo odio, porque según ella estaba ahí obligado, devolviendo lo que ella había hecho en el funeral, y se sintió terriblemente mal al haberle puesto por un momento la cara de Víctor a victoriano, aunque fuera por un acto de autodefensa.

Le pidió que se fuera y este a regaña dientes lo hizo, no quería era egoísta pero no deseaba que el sueño de una familia con Inés terminara...

La primera noche con Emiliano fue un suplicio, y no porque llorara si no porque la realidad la golpeó cuando intento dormir un rato y a su mente se le vinieron todos los planes que tenía con su marido, su boda y lo feliz que fueron....
Intento apagar las voces de su cabeza, pero en su sueño apareció victor...