*Iniciada el 25/03/2023*
*Terminada el //*
*No se acepta ningún tipo de adaptación*
*Los únicos personajes que me pertenecen son Atenea y la Doctora Stanford*
-- Pobres humanos...... Permitidme brindaros nuestro poder. -- acerco la jeringa hacia el cuello de cada uno. --Pronto no vais a poder resistiros a nuestro.... intoxicante poder. ---
--No te atrevas a tocarme el cuello hijo de puta-- la castaña se retorcía para alejarse de la aguja que iba hacer insertada en su cuello.
-- Vaya.... Alguien ha sido más fuerte que los demás. Ya mi pequeña niña no te resistas, únete a nosotros y te prometo la grandeza.... -- la chica no le era de mucha importancia al líder como los demás, sabía que el agente le iba a traer problemas y el latino no era de fiar, pero ella no estaba en absoluto en sus planes, ni siquiera sabía de donde había aparecido.
-- Te puedo dar poder, el mundo entero y con quien gobernar por la eternidad, ¿no te gustaría eso pequeña? -- él se encontraba agarrando le las mejillas de la chica.
-- En tú sueños hijo de puta..-- el voltio a verla con asco y le apretó tan fuerte las mejillas que cuando le quitara su mano de ellas le quedaría la marca de esta.
Se alejo de ella y se acercó a uno de sus acompañantes extendiéndole algo. -- Agrégale esto, ella me será útil para después. -- el pueblerino solo asintió a sus órdenes.
La castaña al ver como se acercaba nuevamente a ella empezó a forzar más la cuerda que la tenía sujetada, lamentablemente su cometido no se logró. Al sentir la aguja enterrada en su cuello grito lo más fuerte que puedo, el parásito entro fácil, pero el líquido dolió como mil agujas enterradas en su ser.
El rubio al fin empezó abrir los ojos viendo que se encontraba atado de las manos con una cadena, su primera reacción fue jalar hacia abajo, pero oyó una queja atrás de él.
--Eh, eh, suave...... ¿cómo te llamas? -- pregunto el español.
El rubio se giró para verlo mejor. -- Leon -- el chico empezó a moverse analizando su entorno.
-- No eres muy locuaz. Soy Luis Sera-- Movió un poco su cabeza. -- Creo que tú y yo elegimos mal lugar de vacaciones. --
--¡EH para ya! te mueves, me muevo. Y estoy muy cansado. -- dijo el español cansado viendo a el rubio.
--Y ya veo que planeas. Supongo no es tu primera vez. -- El español sin tener respuesta del agente siguió hablando sobre otro tema. --Diría que has venido buscando a alguien, Talvez a ¿una señorita? -- Esa deducción había captado la atención de Leon. --
-- ¿La has visto? habla ahora. -- Tiró de las cadenas del lado de Sera. --
-- Los oí hablar sobre mover a alguien. -- El agente tenía su cara seria.
--¿Moverla? ¿donde? -- liberando a Sera para tirar la polea.
-- No sé, pero si observé como arrastraban a alguien hacia la iglesia. -- logrando hacer caer el objeto el cual logro hacer despertar a la castaña, la cual nadie se había dado cuenta que se encontraba en una esquina rodeada de cajas y sacos.
El rubio vio atrás de Luis a uno de los pueblerinos a punto de atacarlo. --Luis, CUIDADO! -- Gritó la chica. El castaño sin poder voltear ya se encontraba en el suelo debido a que Leon había evitado el ataque.
La chica se paró al instante viendo como el desconocido en volvía al campesino entre las cadenas así ahorcándolo. -- ¿Están bien ambos? -- pregunto preocupada la chica.
La mirada de ambos chicos cayó sobre ella. --¿En qué momento has llegado? -- se adelantó a preguntar el rubio mientras veía como el español agarraba algo de los bolsillos del campesino.
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Vaya he escrito más de lo normal en este capítulo, creo que me deje llevar.
Quería agradecer a tod@s por leer mi historia, jamás creí llegar a el capítulo 7 en mi primera historia, pero por algo se empieza. Os agradezco mucho, espero les esté gustando la historia.
Espero les haya gustado cualquier recomendación, comentario, sugerencia, etc.... Es bienvenido. Si les gusto les invito a darle a la estrellita. Gracias por leer
