¿Un falso Amor? (Komi can't communicate)

Capítulo 8 Casino +18

Nota: Este capítulo puede ser algo lento y largo, pero creo que vale la pena, en fin,solo quería decir eso, así que sin más, comenzamos 

Cuando dio la hora, Ethan dio aviso de que ahora irían al casino así que la gente que no se retiraba, simplemente caminaban hacia el casino.

Hitohito era guiado por Ethan y compañía hacia el casino al momento de entrar se encontraron con mesas y máquinas de juegos de todo tipo, incluso algunos juegos poco comunes.

—Así que, ¿Qué es lo que piensas jugar Hitohito?

—No lo sé, es la primera vez que visito un casino, después de todo, aún soy menor.

—Es cierto, ah, detalles, en fin, yo estaba pensando en jugar un poco de Black Jack, pero antes, necesitamos ir por fichas, yo creo que pediré 4 millones de dólares en fichas, la noche aún es joven.

—Solo no te excedas amor —dijo Eliette

—Bueno, hoy estás conmigo, así que nada puede ir mal, ¿Qué hay de ti Hitohito?

—Yo solo pensaba usar lo que traigo en efectivo ya que es la primera vez que juego.

—Si, creo que es lo mejor —dijo Eliette —, ¿Cuánto pensabas usar?

—Ahhh 60 mil yenes

—Alrededor de 500 dólares, no es demasiado, pero si los juegas bien entonces podrías salir con bastante más.

Así, fueron a cambiar dinero por fichas digitales, así que luego de unos momentos cada uno fue por su camino.

Mientras Hitohito caminaba por el casino, observaba a la gente, cómo tratase de desentrañar sus misterios, cómo los del propio casino.

Desde la perspectiva de Hitohito, era como si todas esas personas añorasen un leve deseo de libertad o los placeres no solo del juego, si no de las hermosas mujeres que se encontraban ahí, todo esto, terminaba por atraer a los jugadores, como la luz a las mariposas, a su impensada muerte

Finalmente, a Hitohito le llamó la atención una mesa y en ese momento, también hizo contacto visual con un hombre algo mayor, quizá en sus 50.

—Hey, chico, ¿Por qué no vienes a jugar?, Nos hace falta un jugador, con nueve real no se pierde nunca
—dijo con confianza

—De acuerdo, ¿Cómo se juega? —mientras se acercaba a la mesa

—Esto es como el Black Jack, solo que en lugar de jugar a sumar 21, juegas a sumar 9 real, es sencillo en realidad, nuestro crupier nos da dos cartas y tu decides si pides otra o no, si te pasas de nueve se toma en cuenta el segundo dígito de la suma de las cartas y simplemente gana el que le de al nueve o el que quede más cerca.

—Ok, ¿De cuánto es la apuesta?

—La apuesta no importa ya que si nadie gana, ambos montos van al monto acumulado, jugaremos 5 partidas y ganará el que tenga más victorias, el ganador se lleva la banca de todo lo que va de la noche, la banca asciende a 200 millones de dólares, así que ¿Qué dices chico?

—¿Y qué haremos en caso de empate?

—Es muy baja la probabilidad, pero de ser así, entonces, simplemente jugaremos una mano de Póker 

—De acuerdo, comienzo con 100 dólares 

—Esa es la actitud

Así, Hitohito se sentó en aquella mesa y el Crupier (Uno de los jugadores que se denomina como banco o banca) comenzó a abrir ocho barajas completamente selladas y a retirar las cartas de  comodines, luego, comenzó a mezclar las cartas, no con una mezcla americana, ni una mezcla faro o por arrastre como lo harían en el póker, si no colocó todas las cartas jugables en la mesa y comenzó a revolverlas moviéndolas de un lado a otro, lo que contrario a lo que puedas pensar, es uno de los mejores modos de mezclar las cartas en una situación ya que ni siquiera el crupier tiene el control total de las cartas.