Entre youtubers

CAPÍTULO 5: DE VERDAD.

NARRA CINTHIA:
Ya habían llegado todos lo youtubers, cada uno en sus respectivas habitaciones (había alguna que me daba miedo hasta rozar la puerta) estaba realmente muy variado. Los conocía a todos de Youtube, pero no había hablado con ninguno JAMÁS, ni Sarah.
Nos daba un poco de miedo pensar que no conocíamos a nadie, pero somos de llevarnos bien en seguida.
-Por favor, en media hora queremos a todos los participantes del campamento fuera.-Anunciaron por megafonía.
¡Uy! Se me olvido comentároslo, las habitaciones son de cuatro o cinco camas separadas, y según salías había un largo pasillo que te llevaba fuera. No era muy grande, pero, ¿Qué más íbamos a pedir de un campamento?(Tenía retrete para mi sola, ¡HÁ!, no necesito más.)
En frente teníamos la habitación de Rubius, Mangel, Alexby y Cheeto.
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Después de explorar a profundidad la habitación salimos como nos habían mandado.
En el mismo momento en el que estábamos saliendo nosotras, Rubius y compañía salían de su cuarto. Los miré uno por uno hasta llegar a Rubius, y le miré sin hacer ninguna expresión facial, simplemente seria. Pareció sorprenderle bastante y miró hacia otro lado. Me di cuenta de que era realmente alto. Debía medir 1'90 y era muy delgado, parecía Slenderman.
Salimos apretados del pasillo hacía fuera donde vimos el enorme campo verde por el que entramos. Había un montón de youtubers más.
-Os informo de que las habitaciones aún no están completas. Faltan muchos youtubers que todavía no han llegado-informó Marcos- Por ahora tenéis un par de días libres para hacer lo que queráis y explorar libremente hasta que estemos completos.
Cuando nos íbamos a marchar añadió...
-Ah, pero tenedlo claro. Seguirá habiendo quedadas. Para evitar el distanciamiento del grupo.
-BUUUUM! In the face.-Le dije a Sarah por lo bajo.
Lo que más me apetecía era tumbarme en la cama con Sarah y grabar, hablar, editar, grabar, hablar, editar... No tener que aguantar las quedadas con las mente-cortas de nuestras compañeras de piso y nuestros vecinos. Y sabía que Sarah opinaba igual, y por eso le dije eso. Ella puso cara de: "yeah nigga", e hizo el gesto de estar poniéndose una pistola en la cabeza con la mano.
Fuimos a la habitación y hablamos de lo nuestro pasando de María y Lucía, hasta que decidimos poner la oreja para saber de que hablaban.
-Sí... Pues a mi me parece guapo...
-Esta bien bueno... No tía...
-Pienso quedármelo...
-Preséntamelo...
Se las oía muy poco porque estaban hablando muy bajito.
-Eh Cin (asi me llama Sarah cuando esta de humor) ¿Y si nos presentamos a los vecinos?
Al instante las barbies de Satan (así debería llamarse su canal de youtube XD) se giraron con cara de: os mato bitches.
-¡Claro! Vamos.-Dije yo al ver su reacción.
-¿Podemos ir...?-Dijeron a la vez las dos intentando ocultar que estaban histéricas.
-Claro...-Dijo Sarah.
-Todo sea porque no nos dibujen un pene en la frente mientras dormimos...-Le dije a Sarah por lo bajo.
-Ya te digo- Afirmó riéndose.
*DING DONG*
-Coooño, las vecinas-Dijo con una amplia sonrisa el vecino Slenderman-MAAAAANGEEEEEEL-Gritó después.
-Queh quiereh pesáo.
-Nada que vengáis a ver a las vecinas maleducados- Dijo con tono bromista.
Al minuto estaban todos en la puerta. Lucía y María parecían auténticas estúpidas mirándoles.
-¿Queréis pasar?-Preguntó Cheeto.
-¡Esta echo una mierda gilipollas!-Dijo una voz de fondo que era Alexby, obvio.
Al final acabamos pasando y presentándonos a todos uno a uno. María estaba especialmente interesada en Rubius, porque no paraban de hablar. Yo estuve hablando la mayor parte del tiempo con Cheeto y Mangel al igual que Sarah, y Alexby iba más a su bola intentando librarse de Lucía (que penica da :,) )
De vez en cuando desviaba mi mirada hacía María y Rubius. Supongo que por curiosidad por saber de que hablaban. La muy retrasada estaba intentando acercarse a el lo más que podía. Bueno, retrasado él, por dejarse tocar. No, si esta claro que en este cuarto con olor a pizza y calcetines sudados las únicas normales éramos Sarah y yo.
-Mmm... ¿Puedo ir al aseo? Plis.-Dije.
-Claro, es esa puerta de ahí.- me señaló Cheeto.
Lo primero que hice fue mirarme al espejo. Tenía la cara cansada y llevaba puesto lo mismo que hoy por la mañana. Eso es raro en mi.
Cuando salí choque con algo.
Hasta que levanté la vista.
Corrijo, alguien*.
-Lo siento, lo siento... No n-no sabía que estabas... Bueno, perdón.-Dijo Slenderman con una sonrisa un poco forzada.
-No te preocupes...
No quiero para nada hablar con este chico. Me parece irritante, así que con un: "no te preocupes" es más que suficiente.
Después de vaaaaarias horas de charla, Sarah y yo nos fuimos a nuestro cuarto. Puntualizo, SARAH Y YO.
Las barbies de Satan se quedaron ahí a hablar...(HÁ!)
Cuando íbamos a salir por la puerta, alguien me tocó el hombro por detrás.
Me giré, pensaba que era Mangel o no sé, cualquiera menos... Rubius.
-Oye... Siento lo de la entrada al llegar... Y, lo del baño bueno, solo quería... Que lo supieses.-Dijo bastante serio.
Por una vez me pareció que lo sentía de verdad y me pareció muy tierno...
*Ya Cinthia, momento gay DISCONNECTED*
(Eso era mi conciencia, por si no quedaba claro XD)
Le di un leve golpe en el brazo, y le regalé una gran sonrisa.
-No te preocupes... De verdad.
Esta vez, de verdad.