Nunca te cases con un hombre con dos 🍆 🍆 ⲦAⲈ𝓖ⲒⲔⲞⲞⲔ

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Jungkook dijo esas suaves palabras, rascándose tímidamente la parte superior de la cabeza cubierta por su desordenado pelo.

Aunque Yoongi pensó que esas palabras eran algo ridículas, se sintió conmovido. Por supuesto, también comprendió que la buena voluntad de Jungkook se debía a que era mujer. Desde que inexplicablemente vino a este lugar desolado y atrasado, sin forma de volver atrás, sólo puede esforzarse por sobrevivir aquí.

Hizo una seña a Jungkook, indicando que se acercara. Jungkook miró fijamente un par de ojos verdes como el jade: "¿Qué?"

"Te revisaré la cabeza para ver si tienes piojos". Yoongi agarró los pequeños brazos de Jungkook y tiró de él hacia delante, casi desmayándose ante el hedor que salía del cuerpo del chico. El pelo rojo brillante de Jungkook estaba duro y punzante, probablemente porque hacía mucho tiempo que no se lo lavaba. Se quedó mirando el nacimiento del pelo de Jungkook, frunciendo el ceño. "¿Cuántos días hace que no te bañas?".

Jungkook nunca había sido tocado tan íntimamente. Había cierta resistencia en su corazón. Entonces oyó que a la otra persona le daba asco su cuerpo sucio. De repente se exasperó bastante: "¡Así son los machos! Así se comportan los hombres!".

Yoongi casi no pudo contener la risa. ¡Ser varón no significa no preocuparse por la higiene! Una vez más, miró atentamente la casa sucia de Jungkook y vio que había un cubo de madera en un rincón. Le dijo a Jungkook: "Ve a llenar ese cubo de agua. Debemos limpiar este lugar".

Miró a Jungkook, que seguía mirándolo fijamente sin moverse. Yoongi se rió: "Ten por seguro que no volveré a huir".

Aunque la cara de Yoongi tenía vetas de suciedad, cuando sonreía aparecían sus dientes de tigre. Parecía realmente soleado y brillante. Jungkook le miró asombrado durante un momento y finalmente salió con el cubo.

Los árboles del patio tenían tendederos colgados. Yoongi odiaba el olor de la ropa de cama mohosa, así que no dudó en sacarla y tenderla al sol. Obviamente, Jungkook no tenía ropa de cama extra. Yoongi sólo podía rezar para que el sol matara las posibles pulgas de la ropa de cama.

Quizá la vigilancia de Jungkook no había desaparecido, porque su regreso fue rápido. Era tan pequeño y su cuerpo tan delgado que, cuando llevaba el cubo, era fácil que la gente sintiera amor y afecto por él. Yoongi no pudo evitar volver a tocarle la cabeza. Jungkook aún parecía incómodo al tacto, pero no intentó escapar.

Yoongi encontró un trozo de tela que podía usar como trapo. Ni siquiera había bañera. Tuvo que lavar el trapo en el cubo, frotar las patas de la mesa para limpiarlas y luego ordenar la basura en un rincón de la habitación. Cojeaba por la casa poniendo orden mientras Jungkook se sentaba con las piernas cruzadas en la cama.

Yoongi se acercó a Jungkook con los brazos llenos de ropa sucia y se la dio diciendo: "Vamos afuera".

Jungkook quería establecer su propia autoridad, pero viendo cómo sonreía Yoongi, al final, siguió ayudando. De alguna manera, pensó que era muy interesante ver a Yoongi tan ocupado.

Después de media hora, la choza estaba limpia y ordenada. Yoongi asintió y dijo: "Ahora esto parece un lugar donde vive gente".

Recordó al niño de pelo plateado que había conocido antes y preguntó a Jungkook: "He conocido a un niño de pelo plateado que parece limpio, ¿quién es?".

Cuando Jungkook oyó eso casi le estallan los pelos. Miró sospechosamente a Yoongi y dijo: "¡Taehyung, ese ****! ¡¿Por qué lo conoces?! Te lo estoy diciendo, ¡sólo puedes ser mi futura esposa! No se te permite acercarte demasiado a otros hombres!".

Las comisuras de los ojos de Yoongi se crisparon, pero se abstuvo de tirar al chico de las orejas. Dijo, con toda la calma que pudo: "Sólo lo conocí una vez y pensé que no es como los demás de aquí. Y deja de llamarme tu futura esposa".