I finally managed to be myself

Something to tell you

Se encontraban arreglándose para un nuevo día escolar. Eran aproximadamente las 6:30 am, y las clases comenzaban a las 7 de la mañana.
Era una mañana tranquila, no había problemas, misterios, no había nada de que preocuparse, era un día escolar normal. Nada más.

— Weds, ¿Me ayudas? — Preguntó la licántropo, acercándose a la pequeña gótica, tratando de ajustar su corbata, cosa que realmente no estaba logrando.

La Addams se acerco a su pareja con lentitud, y con sus frias manos, tomo el nudo mal hecho de aquella fina corbata color negro. Colocándola correctamente, sin expresión alguna en su rostro.
Mientras Sinclair miraba con duda a Wednesday, la miraba como si estuviera preocupada.

“Tengo que decirle...”

Esa frase no salía de su mente, se encontraba torturandola, pero no podía decir de la nada “Realmente soy un chico ”. Claro que no, tenía que ir lento, con seguridad. Asi que había decidido darle pequeñas pero sutiles indirectas a la gótica, esperando que esta las captará para así, cuando llegue el momento de hablar, no sea tan pesado.

— Weds — Llamo nuevamente, utilizando su tono de voz normal, tomando el rostro de la gótica con sus manos, mirándola fijamente a los ojos.

— ¿Qué sucede? — Preguntó sin más, aún manteniendo su rostro sin expresión alguna. Pero sus ojos tenía un brillo, un brillo que Enid le había dado.

— ¿Me seguirías amando aunque fuera un gusano? — Idiota, realmente era una pregunta bastante idiota.

Pero era Enid, así que cualquier cosa podría preguntar aquella chica, y aunque sea la cosa más sin sentido del mundo, Wednesday lo encontraba tierno.

— Por supuesto, te seguiría amando aunque fueras un gusano — Una sonrisa ladina adorno su rostro, y aunque odiara admitirlo, si había encontrado gracioso aquella pregunta.

— ¿Y si fuera un gato?

— También.

— ¿Una paloma?

— También.

— ¿Un perro?

— ¿Qué no eres un perro ya?  — Solo recibió un pequeño golpe en el hombro, y Enid comenzó a reír, relajándose un poco en el momento, dejando de pensar en lo que le tenía que decir a su novia.

Pero algo intrigaba a Wednesday.

¿Por qué Enid le preguntaba semejantes cosas?

.

.

Se encontraba en los vestidores, había terminado su lección de esgrima de la semana.
Wednesday se había marchado primero, ya que había dicho que tenía una tarea para el club de apicultura, a lo cual, Enid había quedado sola.

Había entrado a el vestidor de mujeres, y abrió su locker, para sacar su uniforme y para proceder a colocárselo de la manera más rápida posible.
Se quitó el traje, y se acomodó la camisa, la corbata mal puesta, y el saco. Estaba por terminar.

Hasta que tocó la falda.

Antes de colocarsela, la observo, la tocó delicadamente, y con tristeza en sus ojos, tuvo que colocarsela.
Y una vez hecho, se miró a el gran espejo del lugar, y la vista, era más que desagradable para ella. Su pecho se notaba, su cabello largo que le molestaba, aquella falda, que para ella, era incómoda.