Las posibilidades de que llegará a hacerle daño, eran nulas. Además no se sentía incómoda estar a su lado.
-La vista aquí es increíble ¿Verdad?.-inquirió Alec volteando a verla.
Ella asintió con entusiasmo.
-Lo es.-afirmo observando gran parte de Volterra, se veía muy hermoso de noche. De reojo observo una leve sonrisa en él rostro del vampiro.-¿Aquí vienes todas las noches?.-inquirió Renesmee iniciando una conversación entre ellos.
-Algunas veces. ¿Sigues viviendo en Forks?.-preguntó Alec con curiosidad.
-Si, aunque mi familia últimamente piensa en mudarse.-respondió Renesmee con un poco de tristeza.
-Será difícil para ti pero lograrás adaptarte.-habló Alec seguro, al tiempo que veía como ella alzaba la mirada y se encontró con los ojos rojos del vampiro.
-¿Como puedes estar tan seguro?.-inquirió Renesmee.
Él rió.
-Es lo único que uno puede hacer ante esos cambios, adaptarse.-contestó Alec agarrando la mano de Renesmee.
Tuvo una extraña sensación al momento de sentir su mano fría, no era desagradable pero sintió una pequeña corriente eléctrica.
¿Como podía explicar esa sensación?
Renesmee soltó una risita nerviosa y asintió convencida de que así seria. Alec se pudo fijar en lo rojas que estaban sus mejillas, debido al frío.
-Al principio pensé que eras más espeluznante.-confesó Renesmee causando la risa de Alec.
-Muchos lo piensan.-Admitió Alec quitándose la chaqueta y poniéndole a Renesmee.-hace demasiado frío para ti.-aclaró.
-Gracias.-susurró ella.-Debo admitir que esto no es tan malo como pensé que sería...
Alec se quedó mirándola, sus labios rosados sin necesidad de brillo alguno y la pestañas, no demasiado largas pero aun así llamativas.
¿De donde venía todo ese interés en ella?.
Exactamente no lo sabía, nunca ante había sentido algo similar.
Al final después de conversar otro rato, decidieron volver al castillo. No sin antes ganarse miradas curiosas.
-¿Quien diría que Alec y tú estarían juntos esta noche?.-comentó Alice con una sonrisa divertida viendo como ella aun tenía puesta la chaqueta del vampiro.
-Es alguien agradable.-pensó en voz alta haciendo que sus padres fruncieran él ceño y su tía Rosalie elevará una ceja con una mirada de "cuentame lo que paso".-Estoy cansada y lo único que quiero es dormir.
No quería dar explicaciones o resivir advertencias, pero en su mente estaban los recuerdos de como bailó con Alec. Sintió sus mejillas rojas, aun estaba sin poder creerselo.
Sin embargo sabía que estarían solo un día más y después se irían, debería estar feliz de poder irse de Volterra pero por alguna razón desconocida no lo estaba.
A la mañana siguiente se dedico a recorrer un poco él castillo junto a su tía Rosalie.
-¿Te trató bien?.-inquirió mirando como Renesmée sonreía levemente.
-Si, fue amable conmigo. ¿Tiene algo de malo?.-Si bien Alec es un Volturi, los "enemigos" de su familia. Pero aquello había sucedido algún tiempo atrás.
-No, pero alguna vez pensaste estar con alguien con quien no fuera Jacob.-aun aquella idea le desagradaba Rosalie y no oculto su expresión.
Renesmee suspiró.
-Solo veo a Jacob como mi mejor amigo.-aclaró la híbrida para después caminar a la biblioteca que había ahí.
De cierta forma estaba confundida, gran parte de su familia suponía que estaría con Jacob incluso ella llego a pensarlo pero también sabía que tenía derecho a escoger con quien quería estar en algún futuro.
Decidió no seguir pensando en aquello.
-No sabia que te gustaba leer.-comentó Alec sorprendiéndola.
-Hay muchas cosas que no sabes de mi.-dijo Renesmee en tono divertido.
Estaba asombrada con la facilidad que podía hablar con Alec. Incluso él mismo también estaba sorprendido.
-Cierto, lastima que te vas mañana y no podré seguir conociéndote más.-comentó Alec inexpresivo no quería dejar ver que aquello le afectaba un poco.
Renesmee soltó un suspiro, se levanto y camino hasta él.
-De seguro los volveremos a ver.-opinó ella poniendo una mano él hombro de Alec.
Él sonrió levemente.
-Tal vez te visite.-intento bromear.
-Y yo estaré feliz de verte.-le siguió él juego Renesmee para después seguir conversando con él.
Le gustaría decir que estaba feliz de poder irse de Volterra pero en realidad no lo estaba del todo, y por la mirada de su tío Jasper se dio cuenta que él ya lo había notado.
Aunque trataba de no pensar en Alec, le fue imposible la imagen de ellos bailando volvía a su mente. No quería que su padre le preguntara algo, por lo que trato de evitarlo y cuando llegaron finalmente a Forks.
Lo primero que sintió fue los brazos de Jacob rodearla, siempre sintió aquella calidez que la hacía feliz... Pero esta vez no.
¿Qué estaba pasando?
A veces la vida nos tiene preparadas otras cosas distintas a las que uno planea.
Aunque en ocasiones tiene uno que enfrentar problemas, para conseguir lo que uno quiere.
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