Yes To Heaven ⸻ ❝Riverducción❞

08

• Edad de los personajes: 26 años.

-Mayo 2023-

El despertador sonó por la habitación, un leve quejido salió de los labios de Rivers, y con la pesadez de sus ojos logró detenerlo.

8:45 am.

Con dificultad salió de las sábanas para dirigirse al baño, ducharse con agua fría sería la solución perfecta para despertar correctamente, sería un día bastante ocupado. Comprar un nuevo lente para la cámara, verificar algunas cosas del restaurante, intentar llegar antes del mediodía para iniciar un stream bastante corto en colaboración, terminarlo antes de las 6:00 pm y posteriormente reunirse con sus amigos para un festival de música. Salió de la ducha y prosiguió arreglarse, dudó un poco en llevar las gafas de sol que normalmente usaba cuando salía para pasar desapercibida ante la gente, tal vez, esta vez sería distinto.

El timbre de la puerta provocó un leve salto en ella, dejando las gafas en la mesa, tomó su bolso y se dirigió rápidamente a ella.

—¿Te tomaste el tiempo de subir? me hubieras dicho que ya estabas aquí, así bajaba al estacionamiento, se nos está haciendo tarde— Cerró, para dirigirse al ascensor.

—Buenos días, yo también te amo— La siguió.

—Perdóname, tengo muchas cosas en la mente ahora— Cubrió su rostro con ambas manos—. Buenos días, ¿cómo la pasaste anoche?— Félix la abrazó por los hombros, haciendo que su cuerpo se recargara sobre él.

—Yo entiendo, es tu trabajo, no tienes porque preocuparte— Dijo, regalándole una sonrisa—. La pasé bien, no hicimos mucho realmente, después del partido fuimos a cenar.

—¿Y no viste a nadie?— Entrecerró sus ojos —. Digo, como la vez pasada una chica creyó que estabas soltero, aunque no la culpo— Comenzó a reír.

—Para nada— Besó su mejilla—. Tampoco culpo a la chica de ese día— Obtuvo un leve golpe por parte de su novia, provocando risas en ambos—. Pero yo solamente tengo ojos para ti — Rivers sonrió tímidamente para tomar los labios de su novio por sorpresa, hundiéndose en un lento y suave beso.

Ambos se separaron para tomar camino al estacionamiento, el tiempo para ella en ese momento valía oro puro. El tráfico estaba a su favor, las personas en Monterrey normalmente empezaban su rutina diaria a primera hora, pero hoy era la excepción. Llegaron al centro comercial y para la sorpresa de ella, la gran mayoría de tiendas se encontraban cerradas.

—No puede ser, abren a las 10.

—¿No hay en otra tienda?

—Ya lo aparté aquí, solo venía a recogerlo.

—No te estreses, si te dará tiempo — La tomó por los hombros para dar un leve masaje en ellos.

Antes de que pudiera pronunciar una palabra más fueron interrumpidos por un grupo de chicos.

—¡Rivers! ¿eres tú?— Ella sonrió como respuesta.

—¿Podemos tomarnos una foto contigo?— Preguntó otro de ellos, lo cual ella aceptó.

Como por arte de magia, el grupo de personas cada vez se hacía más grande, apenas lograba observar lo que pasaba alrededor. Félix, por otra parte la esperaba recargado en el pilar de la tienda, estaba perdido en su celular y no se percató de los jóvenes que le tomaban fotos desprevenido e incluso grababan con sus celulares. Rivers había observado con detalle lo que pasaba, acercándose al grupo de chicos con rapidez.