❗Después de la fiesta❗- Robertopo

#2 | El Juego

❗TW: MUCHOS DETALLES JASJAJDKAK

Los dos chicos se metieron al motel y se estaban balanceando a nada de caerse, que se tomaban de soporte a ambos por los hombros, riendose de cosas estúpidas, cosas normales que hacen los ebrios.

Caminaron hacia la recepción y había una señorita atendiendo, que los reconocía y dudaba de su llegada a un motel solo ellos dos. Le resultaría menos raro si fueran los cinco, o tres, ¿pero dos?

Roberto aún seguía sin ganas de hablar, así que se acercó Gustavo.

– Buenas, emm... –
Miraba de abajo hacia arriba a la chica sentada en su escritorio, y ella le miraba fíjamente.
– Nos da una habitación... Una cam— –
Roberto llegó y le tapó la boca. Él sabía que si solo pedían una cama iban a levantar sospechas de ellos dos.
– Una habitación con dos camas grandes... Solo necesitamos... Eh –
Miraba al relój de su mano y marcaban las 3:45 de la mañana.
– Denos 10 horas... Por favor –
Roberto volteó a ver a Topo y le seguía tapando la boca, y al ver su rostro con su mano en la boca, además de que Topo para molestarlo le lamió esta, Roberto no evitó sonrojarse y excitarse.

Cuando les entregaron las llaves de la habitación, rápidamente se fueron a esta, y se metieron dando carcajadas.

– Estamos jodidos. –
Reía Antuña.
– De seguro mañana sale en los periodicos que nos acostamos juntos en un motel.–
Topo recargó su cabeza en el pecho de Roberto mientras reía y Tito solo se limpiaba la saliva de Gustavo en su mano con su pantalón.
– Quién dijo que nos vamos a acostar..?–
Roberto volteaba a ver seriamente a Topo.
– Oh... –
Tito soltó una carcajada y tomó a su amigo por la cintura y juntó su rostro con el de él.

De repente se escucharon ruidos escandalosos en otra habitación y ambos chicos se quedaron callados escuchando con atención, y a Roberto se le ocurrió una idea.

Volteó a ver a Topo mientras le abrazaba por la cintura con una sonrisa pícara.

– Juguemos un juego... –
Lentamente desabrochaba el cinturón de Antuña.
– El que se corra primero pierde –
Roberto susurró al oido de Topo de una manera muy gentíl y confiada.
A Topo le recorrió un escalofrío y su entrepierna no evitó reaccionar a las palabras de Roberto.

Lentamente lo arrastraban hacia una de las camas y dejándolo sentado por el borde.
– Te parece la idea? –
Topo algo excitado y rojo cerraba sus ojos con fuerza y asentía con la cabeza.
– Vale –
Roberto levantaba lentamente una de las piernas de Antuña para dejarlo abierto. Posó sus manos por el pantalón de él para desabrocharselo mientras que le daba un largo beso francés, que al desabrocharle su prenda pasó hacia el cuello, y Roberto se sentaba en la cadera de Antuña, moviendo su cintura gentilmente para que ambos se pusieran más duros que una roca, y al parecer estaba funcionando rápidamente en Antuña.

Topo estaba nervioso porque había fantaseado multiples veces con eso ocurriendo. Había deseado por años que las manos de Roberto recorrieran su cuerpo sin que fuera solo en los espectáculos. Topo siempre había querido llevar todo más lejos.

Gustavo soltaba jadeos que excitaban más a Roberto, y tenía una mano por la cintura del mayor.

Roberto se quitó su corbata y quitó la camisa de Topo pero dejándole solo la corbata de color rojo vino. Al parecer ese viejito de 60 tenía algo con coger con corbatas, al parecer era masoquista.

Ambos ya estaban muy erectos pero ahora solo hacía falta que Roberto se quitara sus prendas, lo cual no quiso hacer aún. Topo estaba muy perdido en su fantasía como para quitarle la prenda. Se bajó de las piernas de Topo para arrodillarse en el piso y posó su rostro frente a la entrepierna del de lentes. Bajó lentamente su bóxer viendo fíjamente su pija que estaba dura y algo caliente.