#5 | No me dejes solo

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TW: seggso 😼

Topo sintió los labios de Tito con los suyos, y sus lágrimas dejaron de salir. Pronto estaban muy investidos en el beso que sus manos ya habían pasado a darse caricias.

Topo sabía que tan solo terminara la noche el de rulos le diría que todo fue un error, y le daría una excusa para que las cosas entre ellos no fueran incómodas, sabía que Roberto lo estaba usando y que en realidad acostarse con él no significaba mucho ahora, pero de igual manera, el de lentes no quería pensar en eso, era felíz engañandose a si mismo que Roberto de verdad lo quería.

Pronto las manos de Roberto estaban en la camisa de Antuña, y le sacaba esta con bastantes ansias. Ahora los besos pasaron al cuello de Topo y las caricias hacia la cadera. Antuña podía oler el perfume que Roberto se había hechado. En efecto, olía a viejito, pero no era algo que le molestara, era el olor de Tito, y le hacía felíz.

Roberto antes de continuar, se llevó a Topo a su habitación, un lugar más cómodo donde hacer sus cosas.

Tiró a Topo a la cama con fuerza dejándole recostado en esta, y Tito se sentaba encima de su cintura, dando ligeros brincos mientras el mismo se desabrochaba su camisa. Volvieron a los besos apasionados y Topo se desabrochaba el pantalón, y el de rulos no lo pensó dos veces para comenzar a trabajar en ella. Ahora que ya tenía experiencia con él, metía todo lo que podía en su garganta y chupaba con pasión. Topo soltaba gemidos y se sujetaba de las sábanas.

Después de que Roberto lubricara a Gus, ahora que ambos estaban sin prendas, Roberto decidió ser el que prestababa su cuerpo ahora, y tan pronto como sintió a Topo dentro de él no pudo contener sus ruidos.

Toda la noche pasaron haciendo ruidos, y no tenían nada de qué preocuparse ahora. Eran ellos dos en una casa apartada y en un lugar privado. No había nadie que les tomara fotos ni videos, ni periodistas, así que podían hacer todo lo que se les plazcara sin ser juzgados.

Terminaron muy exhaustos de pasar horas y horas, y Topo se había empezado a vestir después de descansar su cuerpo un poco.
–Bueno, ya es tarde... Será mejor que me valla –

Tito no quería pasar la noche solo. Era insoportable, no quería ser dejado solo con sus pensamientos.

–No, Topo... –
Roberto paraba al de lentes desde la cama
–No quiero dormir solo esta noche... Podrías... Quedarte? –
–Tito, ya estoy seco –
–No! No para acostarnos, yo también estoy cansado, tan solo quiero que alguien me acompañe hoy... –
Topo soltó un suspiro y no quería dormir incómodo así que se sacó las prendas hasta quedar en ropa interior, y Roberto solo sonrió de felicidad al saber que Topo se iba a quedar con él.

El de rulos fue a ponerse su ropa de noche y se hechó a la cama junto a Topo, quien había agarrado uno de los libros de Tito que tenía sobre su buró.

Tito apagó la luz y se acostó a lado de Topo, dándole un abrazo, uno muy cómodo.

–Entonces... Esta noche contó..? –
–A qué te refieres, Topo? –
–Si esta noche no fue tan solo una aventura... Si significó algo para tí –
Robertó tardó un poco para contestar, pero por fin supo que decir.
–Significa para mí que arreglamos las cosas –
Decía en una voz suave y cansada.
Topo se acostaba de espaldas y tocaba la entrepierna de Tito, y él sintió un cosquilleo por lo inesperado que fue.
–No estabas seco Topo? –
–No quiero seguir, es solo que te escuchas estresado... –
–Oh... Bueno... Pues si estoy algo estresado –
–Es por Laura? –
–No la menciones mientras me masturbas, pero, sí, es por el divorcio... –
–Hmm, ya veo –
Roberto soltaba ligeros gemidos que eran señales que le decían que Tito lo estaba disfrutando.
–Topo no me puedo correr, yo también estoy seco... –
–Pero estás cerca de un orgasmo sin fluidos, es todo lo que importa –
Roberto respiraba alterado, y sin duda se sentía mucho mejor que cuando él mismo se tocaba, y le estaba arrullando sintiendo las manos de Topo encima de él, y tan solo el de lentes escuchaba el gemido clave y agudo de que había llegado al orgasmo, dejó de tocarle y se iba a lavar las manos para regresar a la cama con Tito, pero cuando regresó él ya estaba dormido.

Soltó un largo suspiro Gustavo, y se volvió a acostar a lado de Tito, y pensar en la noche que había vivido. Aún era dificil decifrar si lo que Tito le decía era verdad. A él le gustaba pensar que lo era.

❗Después de la fiesta❗- RobertopoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora