Camino a lado de Hendery y Yangyang fingiendo poner atención en lo que cuenta Yangyang.
Es la segunda vez que lo plática, la primera vez fue cuando nos vimos en la entrada de la universidad a primera hora del día, venía tan emocionado que me pego la felicidad.
El hecho es que no solo no le estoy poniendo atención está vez, si no que tampoco le puse atención a mi primera clase del semestre, así que mi plan de darlo todo este semestre colapsó en un santiamén.
Un aplauso justo en frente de mi cara me saca de mis pensamientos.
-Xiaojun, vuelve con nosotros- Yangyang me mira con el ceño fruncido- ¿Vas a querer comprar en la cafetería de nuestra facultado o prefieres ir a la de arquitectura?
-Me da igual- Digo tranquilo.
-Sera aquí entonces, luego probaremos la fantastica comida que según venden allá- Dice Yangyang.
-Es buena de verdad, a Lucas y a mí nos gusta- Hendery sonríe mientras se encoge de hombros.
-A puesto que solo te gusta porque a él le gusta - Yangyang de ríe y Hendery le pega en el hombro de broma.
Aún no me creo que Hendery haya conseguido novio en la universidad tan rápido y de tercer semestre (ahora cuarto).
Al principio tengo que admitir que no me fiaba de Lucas. Lo conocimos en un bar cerca de la escuela, había pasado un mes de nuestro primer semestre como universitarios y Yangyang quería celebrar, entonces decidimos ver qué tal estaba uno de esos lugares. Cuando llegamos estaba tan lleno que tuvimos que pedirle a unos tipos si podíamos poner nuestras bebidas en su mesa, esos tipos eran Lucas y Ten, Ten de hecho esta rondando a Yangyang, pero Yangyang no le hace caso porque tiene novio. Y Hendery al parecer tuvo mucha química con Lucas, se pasaron sus números y al mes ya eran novios.
Todo fue tan rápido que nos sorprendió tanto a mí como a Yangyang, Lucas parecía de esos típicos chicos malos, vistiendo de cuero y andando en moto, que no me inspiraba confianza, jamás se lo dije a Hendery porque yo no era nadie para decir algo, tan solo me conocía un poco más que a Lucas. Ahora llevan juntos tres meses y se ven tan enamorados, son muy empalagosos. Yangyang los molesta mucho por eso y Dery solo le dice que es envidia porque el tiene a su novio en otra universidad y no puede estar con él.
Terrminamos de comprar y nos vamos a sentar a los pastos de atrás de nuestro edificio, aún tenemos cuarenta minutos antes de la segunda clase. La mañana es fría entonces bendigo al café que acbo de comprar.
-Entonces Xiao, ¿Le preguntaste al guapo de tu vecino su nombre?- Yangyang alza las dos cejas en modo sugerente y yo niego con la cabeza.
-Estabas muy animado antes de salir de vacaciones, dijiste "Tomaré el valor y le pediré su nombre"- Hendery cambio su tono de voz, imitandone.
-¿Sabes que es asombroso?- Dice Yangyang- Que nunca te lo hayas encontrado por los pasillos, en la cafetería o en los baños.
-La escuela es grande, además debe estudiar algo diferente a nosotros - Digo con simplesa.
La conversación se desvía a como es que Lucas no le dio los buenos días a Hendery y eso hizo que se sintiera muy triste.
Entoncess aquí está la razón por la que no me pude concentrar en clase: Mi vecino de enfrente con el que tengo una clase de enamoramiento.
Para empezar, hace casi cuatro años se mudó junto con su mamá, papá y hermano y a pesar de vivir tan cerca (solo es cruzar la calle), jamás le he hablado, ni un saludo le he dirijido.
Aún recuerdo la primera vez que lo vi, traia puesto un suéter café de cuello de tortuga y manga larga, el cabello ligeramente largo y de color café, yo caí desde ese momento que lo vi sacar de su auto unas cuantas cajas.
Mi mamá conoce a su mamá por las juntas vecinales a las que ha ido, y evidentemente han platicado y conoce el nombre de toda la familia, pero yo no he querido que me cuente cómo se llama él. Mi mamá se burla de eso, dice que moriré y jamás sabré cómo se llamaba.
Al principio pensé que era de mi edad, los dos saliamos casi a la misma hora, digo casi porque yo veía por la ventana cuando se iba y yo salía un poco después para no encontrarmelo, aunque había veces en las que su autobús se tardaba mucho y yo lo veía desde lejos y como tomábamos rutas diferentes concluí que iba a una preparatoria distinta. El no reparo en mi presencia ni una vez durante yo iba a la preparatoria, es más ni ahora y tampoco es como que haya muchas ocasiones para encontrarnos, cada quien vive en su mundo.
Lo que ocasionó que me armara de valentía o que animará a preguntarle su nombre y que me enterará que no era de mi edad, fue que descubrí que estudia en esta misma universidad en la que estoy yo pero probablemente es un año más grande que yo.
Un día del semestre pasado, iba saliendo de casa para venir a la escuela cuando justo se estaba subiendo al carro de su familia del lado del piloto, vi como arranco y se fue. Más tarde cuando llegue a la universidad, estaba cambiando por el andador del estacionamiento y el paso justo a lado en su carro, lo vi rápido y eso basto para dejarme en shock.
Concluí: Es mayor de edad porque tiene permisos de conducir.
Hasta hoy habíamos estado saliendo a la misma hora pero hoy no fue así. c
Cuando me fui su carro seguía aparcado y no había luces prendidas en su casa. Cuando me estaba arreglando tampoco escuché la reja de su casa abrirse, por lo tanto aún no se había ido. Así que gracias a ese suceso me la pasé pensado en si estaría bien o si había cambiado su horario de clases, incluso si se habría cambiado de universidad.-Oh, Oh- Hendery grita emocionado y me saca de mis pensamientos - Lucas dice que viene para acá.
-¿Y para que lo quiero aquí?- bromea Yangyang y yo me río.
-Que chistoso, hoy entro tarde porque metió el horario de las nueve entonces por eso no me dio los buenos días como siempre, estaba dormido. - Nos explica.
-¿Entonces ya no estás triste?- Le pregunto y Hendery niega.
-Sigo pensado que es tonto ponerse triste por eso- Dice Yangyang.
Asiento y le doy la razón a Yangyang, no se cómo podría ponerte de mal humor o triste que tu novio no te de las buenas noches. Quizá lo entenderé cuando tenga novio, o sea, en mil años.
-Hola chicos- Escucho la voz de Lucas a mis espaldas y volteo para saludarle mientras bebo de mi café.
Café que escupo cuando veo quien está a su lado.
Mi vecino de enfrente.