¹ The Feels. ━━━ Vinny Hong.

1│ ❝ The beggining ❞

DEANNI SUNG.

―¡Todo es tu culpa Deani! ―Nada más llegando al salón, fui recibida por una Aria furiosa para luego esconder su cara en la mochila. Mire a Ayan, la cual estaba viendo un video de unos cantantes reconocidos.

Ella al sentir mi mirada, me respondió diciendo; Se le declaró a uno de tercero y todos ya lo saben. Solté un suspiro, con razón está así.

―Tranquila Aria, no pasa nada.

―¿No pasa nada? ¡Soy viral en todo internet por declararme a Jay!

Hice una mueca, solo pude darle palmaditas en su espalda para consolarla. No soy buena con las palabras y Ayan si lo es pero cuando esta viendo videos de sus cantantes idol, no le gusta que la molesten.

Una de la madrugada más tarde...

―Pareces una acosadora Aria. ―Mencione mientras jugaba con mi teléfono. Vinimos a ver a ese equipo entrenar, bueno en realidad Aria me obligo a venir con ella a ver a ese tal Jay.―No tomes fotos de él.

Aria baja de mala gana su celular, mirándome mal en el proceso.

―Pero. . . Es que se esta volviendo más guapo cada día, Deanni.

―Esa es la frase que dice una acosadora. ―Levante la mirada del celular para mirar a un tipo de sudadera azul aparecer y es rubio.

Me coloqué mis audífonos no quiero escuchar una estúpida plática entre acosadores. Sé que ese rubio anda detrás de la novia de ese chico de tercero. Antes de que pudiera poner una canción, Aria me tomo de la mano y comenzamos a correr hacia un oscuro callejón.

―¿Q-Que esta pasando? ―Pregunte como puede pero no respondió.

Aria se detuvo me extendió su celular, para después adentrarse a lo que parecía ser una pelea mientras se ponía una bolsa en la cabeza.

Recordatorio, debo de conseguir una mejor amiga sin problemas.

No me preocupo por ella. Aria es una buena peleadora, eso lo sé más que nadie. Me salvo cuando un tipo ebrio quería propasarse conmigo y desde ese momento nos volvimos mejores amigas, casi hermanas.

Una hora más tarde, estaba caminado hacia mi departamento pero antes tengo que hacer una parada al supernocturno, no tengo nada.

En eso siento una mirada profunda en mi espalda, fruncí el ceño al ver como un pelirrojo en bicicleta venía hacia mí.

¿Es un ladrón? ¿Viene a robarme?

Mierda, este no es mi día.

―Tú eres esa chica. . . Gracias. ―El pelirrojo hace una reverencia provocando que yo lo observe confundida. No recuerdo hacer algo como para que él me agradezca, creo que se confunde de persona.

Espera. . . ¿No viene a robarme?

Pero al momento de ver sus ojos, lo recordé. Era el hijo de esa mujer que se disculpaba con esa tipa maleducada en el centro comercial.

―No es nada, no tienes que agradecer. ¿Tu madre se encuentra bien?

―Lo está. ―Yo sonreí ante eso, lo último que supe de ese asunto, fue que la mujer se desmayó y mi agente contacto a una ambulancia.

―Es algo bueno... ―Mi celular vibro, era un mensaje de mi abuelo.

Hoy es su cumpleaños número setenta y uno. Mi familia organizo una gran cena, a la cual no puedo asistir por orden de mi hermano, Khail.

Y no es como si me importara mucho ir a convivir con esa fea familia.

―¿Te encuentras sola? ―Asentí a su pregunta. Aria se había ido con su hermano mayor en el carro, quería llevarme a mi casa pero negué.

Quería tomar un poco de aire fresco.

―Es p-peligroso ir sola, te llevaré a tu casa. Claro, si tú quieres.

Observe al pelirrojo avergonzado que ocultaba sus mejillas rojas.

Él es un chico lindo.