Hermano Mayor

Noche lluviosa

Un mes. 

Había pasado casi un mes desde que John se había unido a la pandilla, y Arthur en verdad había comenzado a tomarle cierto aprecio al niño. Al menos una vez por semana lo llevaba con él al pueblo a tomar una buena ducha, pues cuando Arthur mencionó la idea de que John pudiera bañarse en el río el chico palideció. 

—¿Qué? ¿No resistes el agua fría? —Interrogó Arthur en tono burlón. John negó de inmediato, agachado la cabeza, apenado, dudando unos instantes en responder.

—No sé nadar. —Finalmente admitió, esperando algún comentario burlesco, sin embargo Arthur sólo murmuró  algo como un "ya veo" rascándose el mentón.

El inicio del verano había estado marcado por un insoportable calor, tanto que, cuando Arthur vuelve al campamento agradece ver las nubes grises acumulándose en el cielo, la lluvia quizá ayude a disipar un poco el maldito calor.

Por la noche, cayó la lluvia, pero estaba lejos de ser una lluvia tranquila, una bajo la que Arthur pudiera mojarse cómodamente, era más bien una lluvia torrencial, acompañada por una tormenta eléctrica. 

Arthur no podía dormir. No cuando los truenos le recordaban a los sonidos de balas, su cerebro no dejaba de estar alerta en todo momento, sería una larga noche. 

Y a un par de pies de distancia, John tampoco podía dormir, estaba asustado por todo ese ruido, y mientras estaba hecho un ovillo en su catre, se preguntó si Arthur se burlaría de él en caso de pedirle dormir junto a él, aunque el chico rubio había sido siempre amable con él, una parte del pequeño Marston tenía la tendencia de  esperar a recibir lo peor. 

Un trueno hizo sobresaltó al niño, quien dio un pequeño brinco en su catre. Aquello era demasiado. 

Terminó por meditar el asunto un poco más sólo para al fin decidirse a salir de su tienda cuándo el agua pareció tranquilizarse lo suficiente, y sus pasos eventualmente lo condujeron a la tienda del joven Morgan, titubeó acerca de despertar a su hermano, y sin embargo se armó de valor para abrir la tienda y asomarse un poco. 

Sorpresivamente Arthur estaba tan despierto como él, con unos medios círculos debajo de sus ojos por la falta de descanso. 

—¿También te asusta la lluvia? —preguntó  el mayor sentándose en su catre, recorriendose así mismo un poco. 

—Un poco, todos esos truenos suenan…

—Como balas. Lo sé.— John estaba aún menos acostumbrado a los tiroteos de lo que lo estaba Arthur. —Date prisa y entra. 

Marston obedeció sin chistar, entrando y cerrando la tienda detrás de él; Arthur lo invitó  acostarse a un lado aunque el chico no estaba muy seguro, pero lo hizo, dejando un poco de distancia entre ambos.

A Arthur le costaba entender sus propias acciones ¿por qué era tan benevolente con John? Quizá porque era un huérfano como él y se veía a sí mismo en el niño… sí, podía ser; por eso seguramente procuraba el bienestar del pequeño forajido.

En cuanto a John, aún le costaba trabajo aceptar que alguien pudiera ser amable con él y no verlo con lástima; claro, Hosea y Dutch eran buenos con él, pero había algo distinto en Arthur. John ama a Hosea y a Dutch como a unos padres, pero Arthur… Arthur es como un amigo, o un hermano mayor, confiaba a ciegas en él.

Por la mañana, cuando Hosea planea despertar a Arthur para ir juntos a buscar más provisiones, sonríe con calidez al ver a los dos chicos hechos un lío con las mantas, abrazados y roncando.