Jailhouse (Alcatraz) •• Yeongyu - Sookai

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Alerta de contenido explícito 🚨

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Yeonjun llego casi pateando la puerta de la celda, Beomgyu besaba el cuello del contrario dejando pequeñas mordidas, escuchando la respiración pesada de Yeonjun. Una vez que cerro la celda, estampo de nuevo la espalda de Beomgyu en la puerta, escucho el quejido que el contrario tiro debido al choque.

—Siempre eres así de ruidoso. —Dijo Yeonjun con una sonrisa sobre el cuello del contrario. Yeonjun había perdido el tiempo y ya estaba de nuevo friccionándose contra Beomgyu. Él cual soltaba ruiditos, no quería soltar un gemido fuerte.

Beomgyu no sabía en que maldito momento habían llegado a eso, si hace algunos días le decía a Kai que no se encariñara, que hipócrita estaba siendo ahora abriendo sus piernas listo para recibir algo que claramente no parecía merecer.

Yeonjun recorrió el cuerpo de Beomgyu con palma abierta, pasándola por su espalda, bajando por sus caderas, besando las clavículas, subiendo sus manos por la espalda, trazando la curvilínea cintura de Beomgyu.

Yeonjun tenía ganas de abofetear a Beomgyu, quería destruirlo, dejándolo casi inconsciente, delirando por su culpa, pero también quería abofetearse así mismo, por esta alucinando por Beomgyu, abofetearse por intentar hacer daño al muchacho.

—Junnie~—Gimió sobre el lóbulo de Yeonjun. Empezó a friccionar las entre piernas de ambos, sintiendo la gran erección de Beomgyu sobre su vientre.

Yeonjun tomo fuertemente de la cadera a Beomgyu para moverse hacia la litera, recostándolo cuidadosamente y esperando no aplastarlo. Yeonjun empezó a besar de nuevo el cuello de Beomgyu y desgarro la playera blanca, haciéndolo soltar un gritito.

—Genial...ahora andaré desnudo por la prisión. —Dijo Beomgyu con falta de aire, Yeonjun soltó un quejido ronco.

—Sobre mi cadáver pasara eso, eres mío. — dijo con ese tono ronco y posesivo que muy pocas veces usaba, Beomgyu sintió sus piernas temblar. —Pero dime, ¿crees merecer esto? ¿crees que tu comportamiento amerite esto?

Beomgyu soltó un jadeo, al sentir la mano de Yeonjun recorrer sus mejillas, bajando por su cuello, trazando con sus finos y grandes dedos las clavículas, bajando hasta sus pectorales, dejando caricias en círculos en el abdomen del contrario, bajando aún más, Yeonjun tomo el resorte del pantalón del contrario, para poder soltarlo, causando un pequeño salto en su lugar.

Yeonjun rio bajito y se agacho despacio dejando besos por el pecho de Beomgyu, lamiendo un pezón trazándolo con su lengua, tiritándolo con sus dientes, Beomgyu sentía que sudaba, pero aquella agua salada no salía de su cuerpo, simplemente sentía demasiado calor. El mayor soltó un pezón para ir hacia el otro, y tratarlo de la misma manera, tirando de él, lamiendo y mordiendo. Yeonjun se levantó despacio mirando su trabajo, la hermosa piel blanquecina con toques dorados, llena de marcas hechas por él, su propio trabajo, su obra de arte.

Fue bajando lentamente con besos hasta el abdomen de Beomgyu.

—Pero sigues —Dijo entrecortado mientras lo besaba —Sin contestar mis preguntas. —Yeonjun fue metiendo su mano lentamente dentro del pantalón de Beomgyu, rozando con la punta de sus dedos aquellos rizos color castaño, eran cortos y muy pocos, pero extrañamente Yeonjun los vio como algo hermoso y digno de admirar. —¿Crees que mereces que en estos momentos te esté dando esta atención?

Beomgyu asentía y negaba por los dedos traviesos, sintiendo como su cordura estaba yéndose a la mierda, sentía una excitación que muy pocas veces sintió, solo hizo esto un par de veces que solo quiso experimentar, y se sentía hasta el cielo, solo con el toque. ¿Qué sería de él si Yeonjun lo follaba de verdad? Seguramente se vendría en segundos.