capítulo 3: ¡¡El amor no tiene limites, sino alguien que lo limita!!

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Aisha después de haber dormido máximo unas 4 horas en la biblioteca, fue despertada a gritos por el director del colegio, ella muy asustada se levantó muy exaltada,mientras que los chicos,quienes habían seguido al director, solo murmuraban y reían.

--- ¿Quien te dio permiso de entrar a la biblioteca!? ¡¡Debes tener permiso de tu profesor para entrar!! Llamaré a tu madre ahora mismo!! Como soy un buen director solo te voy a pasar esta!! A la siguiente situación quedara expulsada!!-- dijo aquella señor de baja estatura,bigoton y algo regordete.

Aisha: s-si, señor, se lo prometo! Algo como esto no va a volver a s-s-suceder nunca!!-- dijo muy nerviosa recogiendo sus cosas con prisa y saliendo del lugar despavorida.

Aisha corrió y corrió, hasta salir del instituto las risas y las burlas la estaban mareando,todo el colegio se enteró, ya que alguien se encargó rápidamente de correr la voz de lo ocurrido.
Al llegar a la salida del instituto se dio cuenta que era un día soleado, pero las nubes rápidamente se juntaron haciendo un día nublado y de mal augurio, aisha al mirar a quien la esperaba en las afuera del colegio, nana, quien muy enojada la esperaba junto con la carreta vacía, ya que afortunadamente vendió toda su mercancía.

Aisha: a-ah...—simplemente no tenía palabras para contarle lo sucedido a su tía sin que se enojara más, lo más seguro es que ya estuviese enterada, de una historia mal contada.

Nana: tsk! Sube! Ahora!— con esas frías palabras acompañadas de un trueno algo aterrador, aisha subió a la carreta, a mitad de camino mientras nana regañaba a aisha de lo ocurrido, para completar, empezó a llover y a llover, lluvia las cuales gotas parecían balas.

Nana: ¿porque siempre te metes en problemas? ¿Acaso no te eh dado una buena educación? ¡¿Eh!?— dijo mientras azotaba al caballo para que avanzara más rápido, este solito un relincho, haciendo que la carreta callara junto con aisha y nana, a aquel gran charco.( la mala suerte las persigue jeje)

Nana, quien jalo a aisha del brazo para levantarla del lodo, juntas acomodaron la carreta y clamaron al caballo, la lluvia se calmó un poco ya que estaba muy densa.

Al llegar a la cabaña, empapadas y llenas de lodo.

Nana: ¿te cuesta mucho no meterme en problemas siempre?¡¡todo el tiempo es lo mismo aisha!!— dice más que enojada y muy alterada.

Aisha: p-pero.. yo lo único que quiero es que dejen de juzgarme!!! ¡¡Siempre, de alguna manera,me molestan!! ¡¿Tienes idea de lo que es llegar a un lugar y todos te tachen de fenómeno o cosa extraña!?— dice enfadada y entre lágrimas.

Nana: ¡¡Hubiera sido mejor que tus padres nunca te hubieran dejado conmigo!! Lo único que haces es causarme problemas!!— se sienta en el sillon— tu solo eres un estorbo!!

Aisha: Que...— muy impresionada y decepcionada de las palabras de nana, aisha lo único que puede hacer es correr y correr, escapar,huir y adentrarse más y más al bosque, dejando a nana sola.

Nana: aisha!!! Oye!!!— dice mientras intenta perseguirla pero es detenida por el lodo y un trueno que se interpuso en su camino.

Aisha, quien se adentró al busque mucho más que las otras veces, cae arrodillada llorando, junto con sus lágrimas la lluvia paró y solo se oía el sonido del silencio, el bosque, los animales y el llanto de aisha.

Aisha: ¿p-p-porque....? ¿Porque? Porque... siempre yo...!— dijo limpiándose las lágrimas para darse cuenta que alfrente de ella estaban unas estatuas de piedra, que tenían una forma algo inusual, ya que eran figuras perfectamente bien esculpidas.

Ausha: Que... es... esto...— fueron sus últimas palabras al caer desmayada a mitad de la nada y sus única compañía eran aquellas estatuas que estaban siendo consumidas por la naturaleza.

💫CORAZÓN DE ZAFIRO💫 Aunque vivas en El PasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora