Décimo octava Carta

416 74 10
                                    

Cuando duermes, eres hermoso.

A la hora en que te echaste sobre la cama y me dijiste que me ponga a tu lado, miles de cosas pasaron por mi mente.

No sabes cuánto luche para no cometer una estupidez.

Cerraste tus ojos, y Dios, eres bellísimo.

Ojalá yo pudiera decir lo mismo de mí.

Me quedé despierto.

Porque verte dormir era como soñar.

Con amor, Zayn.

Cartas a Liam. (Ziam)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora