Lan Zhan se casará muy pronto con su mejor amigo y prometido, Wei Ying. A pesar de estar en la era moderna esta unión se desarrolla gracias a la intervención de los intereses de cada familia, pues, los dos no decidieron por ellos mismos estar juntos...
—¿Cómo me encontraste?—preguntó Zizhen, mientras apartaba unos mechones de cabello del rostro sudoroso de su acompañante.
Lan Zhan lo miró a los ojos y continúo con lo que hacía. Sólo habló cuando sintió la punta del pene de Zizhen chocar contra su garganta. Se sacó el pene ya erecto, mostrando una cara de satisfacción.—En la descripción de la página, están todos los datos…
Zizhen hizo una mueca de obviedad. Como HotBoys era un prostíbulo, incluso si tenían licencia, necesitaban poner la dirección de su vivienda por sí el poder judicial o el cliente quería investigarlos un poco más. Ahora se sentía tonto por haber hecho esa pregunta.
Sus pensamientos fueron interrumpidos por el repentino peso sobre sus caderas y la apretada sensación de calidez alrededor de su pene.—¿Tan pronto?—cuestionó mirando como el hombre musculoso lo montaba como hace unas horas, porque habían estado cambiando de lugar en cada orgasmo.
Tenía esperanzas de no olvidar limpiar el piso.
Lan Zhan se estremeció al sentir nuevamente a su trasero ser estirado y llenado hasta el fondo por un jugoso pene.—¿Ya te cansaste?— sonrió burlón.
Su burla fue borrada de un solo movimiento de caderas. No estaba preparado para esa embestida y, por la sorpresa, acabó soltando un gemido casi agudo.
Zizhen sonrió con maldad y empezó a moverse.— Es de tontos responder una pregunta con otro pregunta o, acaso, ¿a parte de ser un depósito de semen, también eres un tonto? ¿Uh?— Ignorando cualquier tipo de súplica por algo de descanso, volvía su agarre más doloroso y sus embestidas más intensas. Convirtiéndo en un desastre al hombre que, por muy duro que se veía hace unos minutos, aún estaba muy sensible por el orgasmo anterior.
Esa sensación. Esa sensación que te obliga mirar al cielo y gritar el nombre del causante de tu placer. Esa sensación pecaminosa y celestial. Lan Zhan la volvía a sentir, formándose como un cosquilleo en la parte baja de su abdomen, justo en esa parte en dónde sentía que era golpeado duramente. Ahora esas palabras que buscaban piedad, se volvieron mentirosas.
Todo se detuvo.
Esa sensación celestial se quedó atrapada.
Lan Zhan miró con ojos brillosos a Zizhen, quería verse molesto pero más parecía triste y suplicante.
Zizhen sonrió de lado, acarició la cintura del hombre y dejó descansar su mano sobre uno de esos musculosos muslos que aún temblaban ansiosos. —Responde la pregunta: ¿por qué estás tan insaciable hoy día?—levantó sus manos al aire dejándole una sensación fría al otro cuerpo acalorado.—No continuaré, si no me lo dices… —
Lan Zhan lo miró de mala manera y, sin decir ni una sola palabra, comenzó a moverse buscando su liberación por sí mismo. No le daría la satisfacción a ese mocoso.
El joven solo suspiró y trató de pensar en otras cosas. Sería difícil, pero obtendría una respuesta. Tenía curiosidad por saber, la razón de esa actitud tan desesperada por tener sexo.
Lan Zhan quería llorar. Estaba tratando y tratando pero sentía que faltaba algo. Por orgullo no quería mirar al joven pero, en un "accidente", sin querer su vista acabó en las grandes manos venosas que lo habían estado sujetando desde hace horas y ahora estaban ahí, indiferentes ante su presencia.
No quería admitirlo.
No.
No. No las quería.
….
Las necesitaba.
Zizhen estaba a punto de perder la paciencia, también estaba luchando contra su dolorosa excitación, iba a mandar al demonio su propia palabra y hacer su trabajo como es debido. Pero, sus manos fueron tomadas por una suavidad única pero a la vez algo tosca por su grosor. Abrió los ojos y vió a esas blanquecinas manos que arañan su espalda ser las responsables de guiarlo hacia una piel muy caliente y sudorosa.
Lan Zhan se mordió el labio al ver que era observado intensamente. Deslizó las manos del joven para ponerlas en su cintura y respondió:—me… me voy a casar dentro de unas horas, así que, apúrate…
Zizhen hizo una mueca de disgusto.—Entiendo… — Ni siquiera entendía porqué sentía ese malestar en el pecho, esto seguía siendo trabajo y él solo un puto más del montón.— Adivinaré… — trataba de mantener la mente clara pero, inconscientemente, sus uñas se hundieron en la tonificada piel.— Después de dejarte satisfecho, me dejarás abandonado por un mes o más, por la luna de miel… ¿Verdad?
Lan Zhan lo miró por unos segundos, suspiró y tocó las manos del joven, aún reposando en su cintura.—Zizhen, yo no te voy a abandonar. Estos encuentros, lo que pasa entre nosotros, solo es tu trabajo y yo pago por tu servicio. No puedo abandonar algo que ni siquiera es mío…
Curiosamente, cuando habló no se burló, ni tenía un tono de molestia en su voz; todo lo contrario, fue como si recién hubiera sido rechazado y de la manera menos cruel posible, casi hasta cariñosa.
Zizhen tragó saliva para ignorar el nudo en la garganta que se había formado.—Bueno… —deslizó sus manos al trasero de Lan Zhan y estrujó las musculosas nalgas, ganándose un jadeo acalorado y una sonrisa en respuesta.—no hay que dejar plantado al novio, ¿Verdad?
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No suelo volver a leer mis fanfics a menos que haya pasado un mes o varios meses, pues, tengo algo que no sé que es pero siempre acabo notando el más mínimo detalle y si está mal, tremendo caos que crea mi cabeza 🐛🔫 Como ahora estoy estudiando para entrar a la universidad (ptmr mantenme) no quería aumentar mi estrés, PERO tampoco me sentía satisfecho con el anterior final, así que, ¡aquí hay uno nuevo!, y con el que estoy completamente satisfecho. 🐀
