•Prólogo•

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Narra la escritora

Gorou (quien era Aquamarine antes de morir) se encontraba atendiendo a una mujer que estaba en su quinto mes de embarazo y diciéndole el sexo de su bebé.

— Es un niño — le dijo Gorou a la mujer — felicidades.

— ¡Mi marido estará tan feliz al enterarse! — dijo la mujer muy feliz — el siempre ha querido un niño.

— Y ahora lo tendrá — le respondió Gorou — dígale de mi parte que muchas felicidades.

— Lo haré, doctor — contestó la mujer felizmente.

Cuando la mujer se fue Gorou salió del consultorio para ir a buscar un café, pero se chocó con una mujer que no se fijaba por dónde iba. Ambos cayeron al suelo y a la mujer se le cayeron varios papeles📋.

— Oh cielos perdón — dijiste recogiendo los papeles — no me fijaba por dónde iba perdón de verdad.

— Tranquila — te dijo Gorou ayudándote a juntar los papeles — está bien. Yo tampoco me fijaba por dónde iba.

Gorou te ayudo a juntar los papeles y al dártelos pudo ver tu rostro. Le pareciste hermosa a primera vista hasta el punto de sonrojarse al verte.

 Le pareciste hermosa a primera vista hasta el punto de sonrojarse al verte

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(Así eras tú. Si no te gusta puedes cambiarlo a tu gusto).

— ¿Eres nueva aquí en el hospital? — te preguntó Gorou — no te había visto antes.

— Si, hoy es mi primer día trabajando aquí — le respondiste con una sonrisa — trabajo con cuidar de niños enfermos. Acabo de atender a uno que tiene cáncer con tan solo 7 años, y es una lastima que alguien tan pequeño tenga que sufrir esa horrible enfermedad. Yo tenía una hermanita menor pero...murió a los 6 años por cáncer. Yo tenía 11 años en ese entonces y decidí que quería convertirme en doctora para poder ayudar a niños con enfermedades como esa.

— Lamento escuchar eso — te respondió Gorou con una mirada triste — puedo ayudarte con esos papeles si gustas.

— Mmm...si no es molestia está bien — dijiste sonriendo.

— Claro que no es molestia — te respondió Gorou agarrando la mitad de los papeles — ¿Dónde queda tu consultorio?.

— Por allá — dijiste apuntando a la puerta de un consultorio.

— Que coincidencia — dijo Gorou sonriendo — está al lado del mío.

— Vaya coincidencia — dijiste también sonriente.

Gorou te ayudo a dejar los papeles en tu consultorio y luego te invitó un café☕ en la cafetería del hospital. Tu aceptaste y fueron a tomar el café y a hablar de diferentes cosas para conocerse un poco más.

— ¿Y cuántos años tienes? — te preguntó Gorou.

— Tengo 28 años — le respondiste — ¿Y tú cuántos años tienes?.

— Tengo 30 años — te respondió Gorou — soy Gorou Amemiya (creo que ese era su apellido).

— Yo soy Tn Watanabe — le dijiste sonriendo.

Siguieron hablando de cosas cotidianas de la vida, como sus pacientes, familiares, sus vidas, etc.

— Bueno, Gorou — dijiste aún sonriendo — debo irme, pero nos podemos ver mañana.

— Me encantaría — dijo Gorou — ¿Amigos?.

— Amigos — le respondiste.

Se siguieron viendo todos los días, e incluso lo ayudaste con el embarazo de Ai Hoshino, quien era tu idol favorita.

Faltaba poco para que Ai diera a luz y Gorou y tú se estaban despidiendo en la entrada del hospital. Se habían vuelto muy cercanos a tal punto de que ambos se enamoraron perdidamente del otro pero no sé animaban a confesar sus sentimientos.

— Oye, Tn — te dijo Gorou — escuché que tienes una paciente que está embarazada y va a dar a luz pronto. ¿Como se llama?.

— Su nombre es Fuyuka Kato y su esposo es Tetsuo Meisuke — dijiste felizmente — hace unos días estubo a punto de perder a su bebé pero pude salvar a su bebé y ella dijo que como agradecimiento le iban a poner a su niña mi nombre, jejeje.

— Pues tiene sentido — dijo Gorou — no solo porque salvaste a su bebé, sino también porque tu nombre es muy lindo, Tn.

— Oh, gracias Gorou — dijiste sonrojada — nos vemos mañana.

— Nos vemos — dijo Gorou también sonrojado y sonriendo.

Cuando saliste del hospital e ibas de camino a tu casa pudiste ver cómo un niño se zafaba del agarre de su madre para ir corriendo a la acera de al lado pero un camión iba a pasar sin que el niño se diera cuenta. Tu te diste cuenta de que el camión no podría frenar a tiempo y que su madre no podría hacer nada así que sin pensarlo dos veces corriste hacia el niño y lo empujaste a la acera pero no te dió tiempo de salirte del camino así que el camión te atropelló. El camionero se bajó para llamar a una ambulancia mientras la mujer y el niño se acercaban a ti para tratar de ayudarte pero poco a poco tus ojos fueron perdiendo su brillo y falleciste.

Estabas en un lugar oscuro sin saber a dónde ir pero sabiendo que estabas muerta y recordando como pasó todo y cada detalle de tu vida. De pronto viste una luz y pudiste escuchar una voz que te decía que fueras hacía la luz, que nada malo te pasaría, que habías sido una buena persona y la vida te lo recompensaría dándote una segunda oportunidad de vivir.

Fuiste hacia la luz y lo siguiente que pudiste ver era que la misma mujer que habías ayudado a que no perdiera su bebé te tenía en brazos y una enfermera le avisaba de tu repentina muerte.

— No puedo creer que Tn murió — dijo la mujer mientras su marido la consolaba — con más razón me gustaría que nuestro bebé llevará su nombre.

Su marido y ella te miraron con una sonrisa y lágrimas.

— Bienvenida al mundo, nuestra pequeña Tn Meisuke — dijo la mujer.

Te sentías confundida hasta que caíste en la cuenta de lo que estaba pasando. Dios te había dado una segunda oportunidad de vivir gracias a qué fuiste una buena persona en tu anterior vida, y esa oportunidad fue la de renacer en el cuerpo de la bebé que salvaste hacía unos días.

Lo que no sabías era que Gorou había muerto al mismo tiempo que tú pero en un lugar diferente y de una forma diferente y que el también había reencarnado en el cuerpo de un bebé, pero en el bebé varón de Ai Hoshino, Aquamarine Hoshino.

♪Volvernos a encontrar♪ (Aquamarine x lectora)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora