E-004: Sueños

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*Me desperté con gran dolor de cabeza, puede que me hubiesen drogado o algo peor, simplemente no quise pensarlo. Al sentir algo sobre mi nariz, abrí los ojos y me fijé en que estaba echada delante de un inmenso árbol, del cual había caído una pequeña hoja en mi nariz. Me levanté y lo vi: era un valle y, a lo lejos, se veían miles de montañas. Era precioso. Me habría quedado viéndolo hasta que me durmiera nuevamente, pero un sonido bastante ronco interrumpió mis pensamientos. Pegué un brinco del susto y me giré rápidamente.

Tn: ¡Oh, perdona!

Dije, viendo cómo lo que parecía ser una especie de vaca se acercaba lentamente. Era bastante bonita para ser una vaca. No es que las vacas me parezcan feas, pero esta era muy hermosa. Lo que más resaltaba en aquel animal era su pálido pelaje blanco, acompañado por unos pequeños cuernos de un oscuro color.

Tn: — Hola, ¿qué hace un animal tan bonito como tú en un sitio como este? ¿Acaso no tienes dueño?

Tn se quedó mirando a sus alrededores para comprobar que su dueño estuviese por allí, pero nada, ni siquiera un mísero recinto donde hubiera más animales de su especie.

Tn: — Vaya... Parece que estamos solos aquí.

La pequeña humana se puso en pie y comenzó a observar aquel lugar, tratando de averiguar dónde se encontraba.

Tn: — Pero, ¿dónde coño estoy?

1???: — ¿Las señoritas como tú no deberían ser más educadas?

Tn: — ¿Quién...?

En un movimiento rápido, el individuo que la acompañaba le tapó la boca con una mano y con la otra posicionó un dedo en su boca, en un intento de que la oji (c/o) guardara silencio en ese momento.

1???: — Ssh.

Tn: — Mh?

En ese preciso momento, la chica observó la sombra de alguna persona, probablemente no humana, aproximarse hacia aquel lugar en el que se escondían los dos jóvenes.

Tn subió su vista un segundo para poder ver a ese misterioso chico que le impedía hablar. Era bastante más alto que ella, lo suficiente como para llamarlo "edificio con patas". Tenía el cabello negro, el cual tenía atado en dos largas trenzas. A pesar de tener cuatro brazos, su color de piel era normal, tenía la tez morena y unos extraños tatuajes visibles que se repartían en su cara, cuello y brazos.

Antes de que la menor pudiese seguir observando a aquel individuo tan atractivo, algo la sujetó de los brazos y la elevó hasta una de las anchas ramas del árbol en el que anteriormente había estado descansando. Al estar ya arriba, me fijé en el dueño de la mano que me sujetaba y...

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Continuará...

♡✧⁠*Mi Dios Favorito*✧♡♪- Shuumatsu no Valkyrie Donde viven las historias. Descúbrelo ahora