La otra mujer,
condenada a amar en secreto y soledad,
viviendo en su propia ilusión,
donde no podrá compartir su felicidad.Viviendo con la esperanza de tenerlo todo,
conformándose con miradas robadas y
encuentros clandestinos,
llorando en silencio por lo que no puede tener.Aferrándose a un amor no correspondido,
amando a un hombre que no es suyo.
Queriendo ser más que un instante
pero vivirá en las sombras por el resto de sus días.
ESTÁS LEYENDO
Las cartas que nunca supe entregar
PoesiaAmar es difícil, no siempre funciona. Sólo haces lo posible para no salir lastimado.