LO QUE VIENE DESPUÉS (WHITE X ANNE)

CAPÍTULO 8: ESTO ES MALO.

-UNA HORA ANTES-

Narrador(a):

Es una mañana bastante ordinaria en el asentamiento militar. Un dúo de tubbies militares de alto rango, se encuentran distribuyendo el armamento y a su vez, dirigiendo a un trío de tubbies a su labor. Todo se desarrolla con correcta normalidad... Bueno, en realidad, exceptuando a otros dos tubbies rebeldes que aman gastarles bromas pesadas a sus colegas, parece una mañana común como cualquier otra.

Situándonos en el Ala Médica, en un estante lleno de píldoras rojas y azules, nos encontramos con una mano color púrpura que se lleva un par de frascos, mientras las coloca en un maletín médico. Esa mano y ese maletín pertenecen a cierta doctora en especial. La médico Jane Northbay necesita siempre tener lo necesario para atender a los demás tubbies.

Se lleva el resto a otra habitación, donde los tubbies se encuentran en recuperación. La mayoría ya han sido dados de alta y solo han venido por pastillas para que se les pase el dolor de cabeza o el dolor muscular, que implican las horas de servicio militar.

Una vez terminada su labor, la joven tubbie camina directo al Ala Médica principal, donde por lo regular suelen encontrarse con sus amigos Anne, White y Lenny. Bueno, eso último podría estar en duda.

Por otro lado, lleva consigo equipo de metal afilado, el cual debe guardar en los estantes. Pero ante todo y como todos los días hace, revisa debajo de las mesas. Siempre se deben revisar bajo las mesas.

Ella sabe que lo que hay ahí es algo que no desea utilizar nuevamente. Quizás, solo quizás en caso de ser necesario. Esperemos que sus inseguridades por "ser la tubbie más débil en combate" no la persigan nuevamente.

Ahora que ha acomodado las cosas y tras asegurarse de que no venga ningún personal, se decida a pasar un momento de privacidad para sí misma en el Ala Médica.

Saca una pequeña bocina y con ayuda de su tableta, busca en su selectiva lista de reproducción, una canción. Se suelta la liga que amarra su esponjoso cabello, haciendo que sus rizos se liberen en el acto. Así como a Gary y a Nancy les encanta escuchar "Never Gonna Give You Up" 500 veces del día, Jane ama poner canciones, se encuentra en un dilema entre Kudai, Belanova o RBD, ya que, además de estar en una época a la que los humanos solían llamar "Los 2000", la transporta a un recuerdo que vivió en sus épocas de estudiante teletubbie en la escuela de medicina.

Tras conectar el sonido, comienza a realizar unos pasos de baile, al estilo de una ballerina, siguiendo el sonido de la música retro. Se imagina a sí misma en un escenario multicolor, donde toda la habitación se transforma en nubes de algodón azules, moradas y rosas. En el clímax de la canción, se mueve de un lado a otro, mientras mueve los brazos de arriba abajo y sus rizos se sacuden con cada delicado salto que da.

Lo que no se había percatado al estar tan concentrada en la música, es que alguien estaba cerca.

* * *

—Nadie se mete con mi cuchillo, ni siquiera el imbécil de Gary —. Dice Lenny, refunfuñando mientras avanza.

El tubby ingeniero tuvo algunas ocupaciones en el sistema de comunicaciones. Hoy no ha sido días de revisar el sistema de seguridad. Supone que con las nuevas actualizaciones y herramientas que les compartieron en la base, ya no deberían tener problema con los daños. Aun así, está decidido a ir hasta al extremo de la base, para verificar que todo esté en orden. Puede que lo necesiten allá.

Mientras camina limpiando sus anteojos y limpiando su cuchillo de las huellas dactilares que Gary dejó impregnadas de tubbie-tostada, se acerca a la izquierda del Ala Médica. Aunque sus deseos de saber si alguien se encuentra ahí se interponen, lo primero es el trabajo. El trabajo militar.