Áfati agápi❕ •Sano Manjiro•

Cap-2 Ay no...

Y esto no terminaba, no claro que no.

Estaba tranquilamente comiendo los restos de Guanaco hasta que siento ruidos de motocicleta, muchas motocicletas.
Yo ya no daba más, mi ojo se empezaba a hinchar, mis pelos con nudos por todos lados, mi boca sangrienta por haberme cortado con los brackets, los nudillos adoloridos.  Estaba en las últimas firmemente.

Las motocicletas al parecer venían hacia este lugar, si eran más yakuzas lo lamento por mí pero me rindo, ya estoy satisfecha, morir después de haber comido esa riquísima carne de guanaco podría ser lo mejor que me pasara en este contexto.
Ni intenté pararme, las luces de las motocicletas alumbraban mi cara, por dios, que vergüenza, hoy me había terminado de crecer aquel grano en mi frente y estaba más rojo que nunca, trágame tierra.

rarito1: -Ehhh, ¿hola?.

Mako: -Hola qué tal.

rarito1: -¿Estás bien?

Mako: -¿Te parece?

rarito2: -Que contestona.

Mako: -No es mi culpa que pregunten incoherencias.

Mako: -¿Quieren un poco de guanaco?, me salió caro, y no quiero más.

rarito2: -No.

Mako: -Está bien.

rarito1: -¿Que te pasó y por qué mis compañeros están en el piso?.

Mako: -Tus compañeros casi me matan.
Ay por favor por qué tantas preguntas chicos, llévenme de una vez.

rarito1: -¿Cómo?.

Mako: -¡QUE ME AGARRARON EN PATOTA, SORDO!

rarito3: -¿Por qué tanto escándalo?
A bueno vino toda la prole, se juntaron todos.

Mako: -Ayy, me quiero ir a mi casa.

rarito2: -Tú no te vas hasta que el líder venga.

Mako: -¿Ah?, Adiós.
Me fui. Dejé un poco de guanaco para ellos que sinceramente no llegué a reconocer pero como la estaban haciendo muy larga para matarme me largué. Capaz hoy no era mi día o desafié al destino, pero de cualquier manera ellos me dejaron ir, así que eso es bueno.

Encaminé hasta un poste amarillo que supuse yo que decía parada de taxis o algo así.
Bueno sí lo era porque minutos después ya me encontraba dirigiéndome a mi casa con el poco dinero que me había sobrado del tan caro guanaco.

Mako: -¿Cuánto sería?
,
Conductor: 200 ¥

Mako: -¡¿Tan caro?!

Conductor: Todo sube.

Me dolió en el alma pero le tuve que pagar, al final mi casa no estaba tan lejos de donde ocurrió todo, podría volver a mi revancha. O mejor no, creo que estoy jugando con mi suerte.

Ahora necesitaba superar otra etapa, el rezongo de mi madre más grande que voy a tener en toda mi vida, que miedo, ni había puesto la llave y ya sentía ese escalofrío recorriendo por mi cuerpo, sintiendo cada palabra que me dirá, en lo más profundo de mi ser. Soy una niña de mamá ¿y qué?, como le explicaré que me metí con dos hombres a pelear, no, no, no, esa opción está descartada.
Ay, no lo sé, diré lo que se me ocurra.

Abrí la puerta más tensa que nunca esperando que ella ya se haya acostado, y para mi poca suerte, (la que me quedaba), sí estaba dormida, subí rápido pero en silencio hasta mi cuarto y por fin pude respirar, mis hombros dejaron de estar tensos, salí hacia el baño para agarrar el botiquín y volver a entrar con más nervios.
Me pasé toda la noche frente al escritorio curándome mientras estudiaba. Me estresé un montón pero por lo menos no me dormí con la culpa.