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𝙎𝙪𝙣𝙬𝙤𝙤 𝙥𝙤𝙫
Llegamos a la habitación, y abrí para dejarla entrar primero. Era una habitación bastante amplia. Tenia una cama matrimonial con una televisión de bastantes pulgadas. Le seguía un baño enorme el cual tenía ducha transparente y frente a la cama había una pequeña mesa con un pequeño sofá y un refrigerador pequeño.
—La verdad es obvio pero no he traído nada de ropa.— dijo nerviosa —Creo que llamare a Neri por algo rápido.— asentí y entro al baño.
—Si claro no hay problema.— le sonreí y cuando ella entro afloje la corbata.
𝘿𝙖𝙣𝙞𝙚𝙡𝙡𝙚 𝙥𝙤𝙫
Me metí al baño rápidamente y le marque a Neri.
—Hola Danielle.— su voz fue graciosa.
—Neri, estoy en problemas. Sunwoo reservo una habitación y no se de donde salió mi valentía para decirle que la usemos.
—Pero mira que coqueta y traviesa saliste.— me hablo con tono seductor.
—¡No Neri!.— grite en susurros —No me refería a eso, es largo de explicar. Pero necesito que me traigas algo para dormir y ropa para mañana.— susurre.
—Tranquila mi bella Danielle, yo te llevare lo necesario.— su tono no cambio.
—¿Qué? ¡Neri! ¿Hola?.— me colgó —Ay dios, Neri no me avergüences.— salí del baño.
Sunwoo estaba en la terraza hablando por celular. Me pare frente a la cama y agite mi cabeza por los sucios pensamientos que atentaban mi cabeza.
—No pienses esas cosas.— apriete mis ojos y Sunwoo me hablo.
—Le hable a mi manager para que me trajera ropa.— Sunwoo me explico, iba a hablar pero mi celular suena —Neri llego bastante rápido.
—Si, iré a buscar las cosas.— asintió y yo salí —Neri, eres la mejor.
—Lo se, ahora sube.— subí nuevamente y al salir del ascensor Sunwoo estaba ahí.
—Iré por mis cosas.— asentí y fui corriendo a la habitación y después al baño.
—Vamos Danielle, tranquila.— me apoye en el lavamanos y me mire al espejo —Es tu novio y ya has dormido con el.
Me quite el vestido, amarré mi cabello y me metí a la ducha. Al salir me envuelvo en mi toalla y siento que tocan la puerta.
—Dime.— abrí la puerta sosteniendo mi toalla.
—Oh dios.— susurró —Y-yo te iba a preguntar si estabas lista, para entrar yo.
—Puedes entrar, yo me visto afuera.— asintió y yo salí —Okey Danielle apurate.
Tire mi maleta al suelos y la abrí, me encontré con la gran sorpresa de ver un montón de lencería negra y pijamas muy atrevidos.