The Transcriber |NAMJIN| +18

IV

Ahora ambos estaban fuera de la habitación, Jin sentado tomando café y Namjoon limpiaba el desastre que dejaron ayer.

—¿Ya te vas? —Preguntó Jin.

—Sí, tengo que ir a la universidad. —Namjoon estaba ya por abrir la puerta principal.

—Adiós. —Se despidió Jin yendo de nuevo a la sala.

—Aún no puedo olvidar el hecho de que besé a hyung. —Namjoon solo tenía eso en mente mientras se iba caminando hacia la universidad.

En casa de Seokjin.

Jin tocaba sus labios mientras comenzaba a reflexionar acerca de lo que había pasado la noche anterior. Por supuesto que lo recordaba, pero... a Jin le preocupaba la diferencia de edad, por lo que no sabía cómo sentirse. (O eso quería pensar.)

—Él me... ¿En qué mierda me estoy metiendo? —Se dijo a sí mismo.

Por fin llegó la oscuridad de la noche, así que como normalmente era, Namjoon fue a la casa de Seokjin.

—El cuerpo de Hyera, es como el de un hermoso pétalo de una rosa.

Los sentimientos de Kyong se estremecían dentro de él.

Kyong llevó su cabeza hacia el hermoso pecho de Hyera y con la punta de su lengua lamió un pezón de ella.

Ah... Tres puntos. Ah... Tres puntos. Sigue por favor. Tres puntos.

El movimiento de tu lengua es tan excitante Kyong. Tres puntos. Ah... Más fuerte.

Quiero más. —Mientras Jin dictaba Namjoon relacionaba el beso que tuvo con su hyung y dejo de escribir.

—Oye, Namjoon. —Llamó la atención de este mientras tomaba su brazo izquierdo.

Jin no recibió respuesta alguno por parte del otro.

—Namjoon... —Le volvió a llamar. A Jin le dolía su brazo.

—Lo siento hyung ¿Podría repetir lo que dijo? —Al ver Namjoon a Jin sosteniendo su brazo se acercó a él. —Hyung ¿Está usted bien? ¿Duele mucho? —Colocó su mano con delicadeza en el brazo de este.

El tiempo de Jin con el yeso había terminado por lo que tenía que hacer algunos cuantos ejercicios con su brazo para que esté volviera a la normalidad.

—Duele un poco.

—Hyung ¿Quiere que le dé un masaje? —Preguntó Namjoon y Jin asintió.

Namjoon preparó todo. Calentó agua y trajo un trapo a la mesa donde Jin se encontraba y empezó a sobarle con delicadeza.

—¿Cómo se siente? —Preguntó Namjoon aún masajeando aquella mano.

—Ah... Se siente mejor. —Respondió.

—Y aquí... ¿Duele? —Namjoon fue hacia la muñeca de la mano y Jin soltó un muy notorio quejido.

—Sí... —Respondió con voz quebrantada.

—Lo siento. —Namjoon siguió sobandole la mano. —¿Y ahora? —Esta vez Jin gimió, por lo que Namjoon entendió su respuesta.

—Gracias Namjoon, se siente realmente bien. —Le dió una leve sonrisa.

Namjoon enrollo el brazo de Jin en una toalla y se llevó el recipiente que contenía el agua.

—Creo que hemos terminado aquí. —Mencionó Jin.