-Danmachi: Pasado Cristalino-

Capitulo I

Hi hi, nuevo capítulaso de esta obra que no creo terminar! >:D

Si encuentran algún error ortográfico, agradecería que me lo remarcaran para poder corregirlo!

Dentro vide- ah no, eso no!

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Su sombra...

Tan grande que la torre que funcionaba como una "Tapa" para evitar que los monstruos escaparan del interior de su madre, la Mazmorra, concebida con el nombre de Babel, no parecía más que un hogar de campo opacado por el rascacielos más grande del mundo.

Unos ojos verdes onix podridos que brillaban en el gran abismo de oscuridad me observaban con diversión... con inteligencia.

—Ahhh!—

Me desperté exaltado, sintiendo mi rostro humedecido por las gotas de sudor que se resbalaban por el mismo.

Mis ojos se movieron por todo el lugar, apreciando una hermosa habitación con paredes de madera, un armario y una cama en la que me encontraba reposando hace tan solo segundos.

Trate de tallarme los ojos, para poder apreciar mejor el lugar en el que me encontraba y buscar alguna relación que me diera una pista de este lugar.

Pero cuando lo hice, una fuerza anti-natural me impidió mover mis manos.

Deslice mi vista hasta mis muñecas, que era el lugar en el cual estaba dicha fuerza que inmovilizaba mis movimiento, entonces encontré la razón.

Una cadena hecha de Oricalco negro envolvía mis muñecas, envolviendo primero la izquierda con 3 vueltas bien ajustadas para luego pasar por debajo de la cama hasta la derecha, envolviendola con el mismo patrón que a la izquierda.

Me comencé a sentir nervioso y ansioso. ¿Por qué tenía cadenas? ¿Donde estaba? ¿Que había sucedido?

Comencé a hiperventilarme e instintivamente tire de las cadenas que me aprisionaban, las cuales comenzaron a crujir.

El encantador sonido del metal desgastarse por una fuerza que los superaba lleno mis oidos, pero no pude detenerme por el pitido fuerte que inundaba mis oídos, y bueno, aunque pudiera detenerme, tampoco lo haría, quiero salir de aquí.

Justo cuando las cadenas estaban por colapsar y fragmentarse, las puertas de la habitación se abrieron y del otro lado del pasillo, 3 figuras –de distintos tamaños todas– se acercaron a mi con rapidez.

—No intentes nada, o te mataremos aquí mismo—

La voz serena pero con ese toque de seriedad tan característico de Finn me devolvió la lucidez que había perdido hace un momento.

Los recuerdos inundaron mi cabeza como un diluvio cayendo desde la infinidad del cielo y cubriendo las llanuras con sus mareas.

—Tenemos preguntas que hacerte, y dependiendo de tu respuesta, se decidirá si vives o mueres—

Sus palabras se clavaron en mi como alfileres en los rodillos de lana. No sabía cómo era que no recordaban a mi familia, ¿que no existe? Eso no es posible.

Yo solo asentí con los nervios a flor de piel en estos momentos, sin saber que más hacer en estos momentos.

—Quien eres? Sin rodeos—

Cuestiono con seriedad, el único que hablaba era Finn, Riveria y Gareth no hacían un solo ruido que denotaran su presencia aquí.

—Soy Bell Cranel, miembro de la Familia Hestia—