sush ꔫ mattwoong

padres adolescentes.

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Matthew se sentía un poco culpable, había bloqueado a su novio y se había enfadado con él sin saber que los « sush » podían revivir. ¡No era su culpa! Había visto esa aplicación en tiktok y no investigó mucho de que trataba, solo vio que podría tener una hijita virtual con su pareja y que consistía en darle amor. Parecía fácil.

Aunque Jiwoong olvidó darle amor después de todo. Él era inocente, su hyung debió ser más responsable y darle amor a Martita cuando lo necesitaba. Tonto Kim Jiwoong hyung.

Antes de que Seok pudiera seguir pensando razones por la cual limpiar su conciencia, escucho como la puerta de la entrada sonaba. Alguien parecía estar desesperado por entrar. Obviamente no eran ni su mamá ni su hermana, ellas no son torpes cómo para olvidar las llaves de la casa. Debía ser alguna persona que ofrecía sus múltiples e innecesarios productos que a la semana se romperían, no es como si Matthew hubiera comprado una aspiradora que era vendida como la mejor del mercado y que a la semana dejo de prender. Claro que no.

Toc, toc, toc, toc.

Aish, su casa no era la única en la cuadra para vender productos de ese tipo. Pero esa persona parecía estar empeñada con vender ahí.

- ¡Ya voy! - Caminó hacia la entrada, notablemente furioso. Estaban interrumpiendo su ideas de como disculparse con su noviecito.

- ¡Matthew! ¡Perdón! Sé que soy un novio y padre terrible, pero sabes que amo dormir, olvide que tenía responsabilidades, más con nuestra hijita. - El pelicastaño se encontraba notablemente sorprendido, y un poco avergonzado.

- Hyung... - Sus mejillas ardían.

- Por favor, perdóname, sabes que Martita era la única razón, además de tí, por la cual me despertaba los domingos para darle amor y atención.

- Jiwoong hyung.

- Seré un mejor padre y novio desde ahora, pero perdóname, no quiero que me dejes. Te traje tu helado favorito, también el café que tanto amas, y si quieres podemos ir al parque a ver las nubes mientras nos pintamos las uñas y te lleno de besos. Pero Woohyunie, perdóname.

- Jiwoongie hyung, no necesito perdonarte por nada. Y-yo... los sush se pueden revivir o algo así, lo acabo de descubrir, me comporte como un tonto, pero de verdad estaba muy triste por perder a nuestra hija tan rápido. Perdóname, debí entender que tendrías mucho sueño los fines de semana y no podrías darle amor a Martita. - Matthew se hayaba apenado, su novio paso un mal momento por su culpa.

- Oh... Matt. - El mayor no pudo evitar reírse, su noviecito era una ternura. - Está bien, en parte fue mi culpa ¿Que te parece si revivimos a Martita y luego vamos al parque?

- Me parece una idea estupenda hyung. - El canadiense dió un beso rápido al mayor. Amaba tener un novio tan comprensivo cómo Jiwoong. Amaba que Jiwoong se hubiera enamorado de él.

Al final del día ambos chicos estuvieron mirando las nubes en el parque mientras debatían en que si Martita debía ser hija única o tener un hermano. Un debate muy serio en dos adolescentes enamorados que tenían una hija.