Han Jisung es el presidente del consejo estudiantil -además del hijo del director- y tiene encargado darle la bienvenida a cuatro nuevos estudiantes. Entre ellos, logra ver a un chico sacando un paquete de tabaco y poniendo un cigarrillo entre sus b...
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Después de ese encuentro, Felix y Jisung se hicieron mucho más cercanos. Cuando Felix estaba solo en la cafetería porque sus amigos estaban haciendo algo más, él siempre se acercaba a él y pasaba el descanso con él. Justo ahora, Felix miraba con esos bellos ojitos toda la cafetería. Buscaba a Jisung con la mirada, otra vez estaba solo.
Cuando las puertas se abrieron sus ojos se iluminaron. Han caminaba hacia él con una bella sonrisita. Llegó hasta la mesa y se sentó frente a él.
— Hola Lixie.. —Le saludó—
— Ho-Hola... —Sus mejillas se encendieron levemente—
— ¿Cómo estás hoy? —Preguntó Han, sacando una manzana y dándosela al joven—
— Uhm, bien —Mintió, no quería preocuparle—
Jisung no tenía porque saber sus problemas de casa, ni ninguno. Jisung ya sabía que no podía permitirse un desayuno en condiciones y por eso siempre compartía el suyo. Con eso bastaba.
— ¿Qué clases tienes después?
— Vuelvo a tener matemáticas con el señor Choi, ugh.. —El pecoso hizo un pequeño puchero—
A Jisung le pareció adorable ese gesto.
— Ese hombre te tiene manía —Dijo el mayor—
— Pues sí —Asintió—
— Que se le va a hacer —Soltó varias carcajadas—
Después de esa corta conversación, todo quedó en un agradable silencio mientras comía, solo con el murmullo del resto de alumnos de fondo. Se sentían cómodos los dos juntos.
De repente, Felix carraspeó, llamando la atención del chico frente a él.
— Uhm, Jisung —Le dijo— Sé que no te gusta...salir y relacionarte con la gente pero...
El muchacho le miraba fijamente, en silencio.
— Creo que... deberías venir conmigo a alguna fiesta —Terminó—
Se esperaba un enfado de Han, una negación rotunda, algún que otro grito, pero no. No llegó nada de eso. Solo pudo observar como asentía dándole la razón.
— Bueno... podría intentarlo —Le explicó—
— ¿D-De verdad? —Preguntó asombrado—
— Si, ¿por qué no? —Volvió a asentir—
— Genial, hay una este viernes, y creo que te lo podrías pasar muy bien —Le dijo— Soojin, Ryujin y Chan van a ir, podemos ir con ellos...
— Oh, claro.. —Aceptó—
Y hablando de los reyes de Roma, ahí aparecieron esos tres, sentándose en su misma mesa. Soojin al lado de Felix mientras que Ryujin y Chan dejaron a Han en el medio.
