«El Trato 5» ★ (Vkook, yoonmin y namjin)

Capítulo Final - Parte 2: "El futuro puede ser mejor"

2 semanas después...

Narrador (yo :v): (Corrección, este es el más largo jeje :D)

Los tres menores mantenían las esperanzas de que la libertad llegue pronto, pero existía un miedo respecto a eso. Una vez lo hablaron, si Jc caía, GD quizás también lo haría y, de ser así, acabarían envueltos en un problema aún más grande.

Pese a ahora ser llamados criminales, ellos no se sentían como tales, aún tenían terror de temas como esos.

Los primeros días estuvieron llenos de golpes, amenazas e intentos de abusos de los que tuvieron que defenderse; aunque el rumor de que eran cómplices del cuarteto les hizo ganar algo de respeto, seguía siendo atemorizante estar rodeados de criminales de todo tipo.

Sobre todo, para Jm.

Trataba de ignorar a sus compañeros de celda, pero rara vez lo dejaban en paz. Aunque no lo tocaran, con solo oírlos hablar ya lo incomodaban.

- ¿Tú de verdad crees que algo ocurra?- se quejó uno de ellos.

- prefiero no tentar a la suerte- aseguró el otro.

- están en otra ciudad, no hay forma en que se entere y nos pueda hacer algo- siguió protestando.

- si quieres morir, adelante- murmuró apartándose de su enfrente.

Rodó los ojos y se acercó a Jm. Estaba recostado en su cama, dándoles la espalda, pero al ser jalado del brazo con fuerza, terminó cayendo de esta.

- ¡Suéltame!- gritó mientras se ponía de pie.

- ya me contuve muchos días, la paciencia se acabó- respondió jalándolo cerca.

Jm siguió gritando e intentando liberarse, pero no tenía la fuerza suficiente. Comenzó a llorar al quedar abajo suyo, mientras el otro compañero ignoraba la situación. Afortunadamente, fueron interrumpidos por otra persona.

- Park... Ehh... Ash, ¿Otra vez con lo mismo?- bufó un guardia del otro lado.

- no te importa, ¿o sí?- cuestionó el hombre volteando a verlo.

- de hecho, sí, tengo que llevarme a Park... Anda, levántate y ven- respondió el guardia abriendo la celda.

- debe ser broma- bufó el sujeto.

Jm aprovechó la distracción y alzando su rodilla lo golpeó en la entrepierna, pudiendo empujarlo lejos para ir donde el guardia.

- ¡Maldito niño!- gruñó por el dolor.

- ¡Pedazo de mierda!- respondió el menor.

- ya cállate- soltó el guardia antes de ponerle las esposas.

Cerró la celda nuevamente y se llevó al castaño entre los pasillos del pabellón.

- ¿Tengo visita a esta hora?- preguntó en voz baja.

- algo así- respondió sin voltear a verlo.

- ¿Qué...?-

- cierra la boca si no quieres levantar sospechas- lo interrumpió.

- ¿Sospechas?- dijo confundido.

El hombre no respondió más, así que se quedó con la duda y lo siguió en silencio. Hasta que se detuvieron delante de una puerta a la que nunca había entrado.

- ¿A dónde...?-

- ¿Qué parte de "cállate" no entiendes?- gruñó apretando los dientes- ash, como sea, no creo volver a verte, así que me da igual