Un matrimonio feliz, una bendición cae sobre ellos aunque termine con la muerte de uno de ellos, pero con dos hermosos bebés. Sin embargo la realidad es horrible...
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El azabache despertó y miro el techo, su cuerpo le dolió mucho pues Philza no dudo al momento de morderlo, sintió el como este seguía abrazando su cadera fuertemente y soltó un suspiro, miro fijamente la cara de su pareja, observó cada detalle, sus pestañas,su nariz, sus labios y algunos mechones de cabello.
Acomodo cada mechón con tranquilidad, esperando el momento en que su pareja se despierte, tal vez para ir hacer su día o para quedarse un buen rato así, abrazados, en un mundo solo donde estan ellos dos y nadie más.
Si le preguntas al azabache cuál es su momento favorito del día, este respondería sin pensarlo, que su momento favorito es cuando el y Philza están descansando juntos. Y es que ellos dos, son el mejor ejemplo de que cuando estás con tu pareja, le restas importancia a todo, solo tienes ojos para esa persona.
El rubio mostró señales de estar a nada de despertar, o bueno, eso pensó el greñudo pues el mayor apretó más el abrazo para que esté quieto, sinceramente le dio risa, sin embargo entiende el porque el cansancio de su pareja, después de todo pasar un celo sin calmarlo mediante el sexo, suele ser agotador.
-¿Estas despierto?- la voz ronca de su pareja hizo que el azabache sintiera un escalofrío recorrer toda su alma.
-Sin - Umm, me alegra saber que sigues aquí conmigo - Me gustan esos momentos, donde solo estamos tu y yo - ¿En serio? Tal vez deberíamos quedarnos así todo el día
El azabache iba a contestar hasta que un fuerte grito se escuchó fuera de aquella casa, inmediatamente el rubio frunció el ceño.
-Se te van hacer arrugas si sigues con ese ceño fruncido -Ya lo sé pero, hoy solo quería estar contigo -¿Pero? -Me están buscando
El azabache soltó una risa y Philza solo oculto su rostro, "es igual a un niño haciendo berrinche por no querer ir a la escuela" penso Missa, quién con todo el dolor del mundo decidió salir de la comodidad de su cama y los brazos de su esposo, claramente el mayor mostró su desagrado, sin embargo tenían que comenzar el día.
Durante el desayuno el rubio intento negociar el quedar en su cama sin hacer nada, sin embargo todas estos intentos de negociar fueron rechazados, dejando al rubio derrotado pero no por completo pues logro hacer que su pareja fuera con el para hacer sus actividades.
Salieron de la casa tranquilamente y fuera de esta, se vio a un chico de cabello largo y rubio sentado esperando a Philza, cuando esté lo vio se le iluminó la mirada aunque cuando noto la presencia del azabache se puso de mal humor.
Este rápidamente tomo el brazo del mayor ignorando al azabache quien lo vio completamente confundido.
-¿Philza quien es el? -Oh el es Forever es de los nuevos, por cierto, Forever te presento a mi pareja, Missa te presento a Forever. -Mucho gusto Missa
