Los días pasaban y los recuerdos golpeaban, así como la constante lucha interna, las mentiras a su terapeuta y escuchar las distintas versiones de sus conocidos sobre lo que había ocurrido.
Estaba harta, pasó de ser invisible a ser terriblemente visible, todo por un hombre, no por méritos propios, no por un logro, no por su inteligencia, sino que, según la gente, por ser una “perra” y una “zorra”.
—¿Por qué me está pasando esto?— le preguntó a su terapeuta— Antes hablaban de mí por “no saber darme mi lugar” y cuando por fin lo hago “soy una bruja”— tomó aire, se prometió a sí misma que no volvería a llorar por él— Si era tan cierto que me amaba... ¿Por qué me hace pasar todo este infierno? No puedo estar en un lugar, hacer algo o hablar con alguien sin ser juzgada... Mientras que a él lo ponen como una víctima o un héroe.
—Es la forma en que él enfrenta su dolor— habló su terapeuta— al no haber podido manipularte para que te muevas a su antojo, tenía que encontrar la manera de no quedar mal ante la sociedad y la forma que encontró es hablar mal de ti y de tu familia.
Luego de esa conversación, Nadia se propuso hallar en sí misma las respuestas a lo que quería y a su plan de vida.
A medida que pasaban los días fue descubriendo mucho más sobre sí mismas. Decidió que planearía cuál era la vida que ella querría llevar.
¿Me gustaría casarme o estar sola?
Luego de pensar por un rato llegó a la siguiente conclusión, no se puede amar a alguien en fragmentos, sino de manera completa, tal vez eso era lo que había pasado entre Raimi y ella, tal vez él si la amó, pero solo en fragmentos, no de una forma completa. Tomó la decisión de no entregarse a alguien a menos de sentirse completa, no quería que nadie la amara en fragmentos y nadie merecía ser amado de esa forma, se reconstruiría y amaría a sí misma antes de volver a pensar en amar a alguien.
¿Quiero hijos?
Pensó detenidamente, para Nadia esa pregunta no era un juego, consideraba que traer a un niño al mundo era algo más que un capricho de la sociedad, sus traumas sin resolver podrían llegar a impactar la vida de ese niño. La castaña amaba a los niños, cualquier persona que la conociera mucho o poco podría darse cuenta de ello, los cuidaba y protegía como un halcón, lo que le había dicho a Derek que hiciera era algo que ella misma aplicaba en este particular, era el adulto amigo que le habría gustado tener de niña.
No, niños no.
¿Qué esperaría de una relación?
No sabía a ciencia cierta eso, su yo de antes habría respondido sin dudar que “amor, compresión y reciprocidad” pero si yo de ahora no estaba segundo que solo eso fuese suficiente. “Respeto, admiración, igualdad” necesitaba sentir que la persona a su lado la admiraba y respetaba no solo por quien era, sino también por lo que podía llegar a ser, necesitaba a alguien que fuese capaz de verla como su igual y que esta misma persona sobre la cual generaba ese impacto generace ese mismo impacto en ella.
¿Qué es el amor?
El amor es la unión perfecta entre el respeto, la admiración y el cariño, si estos tres no se encuentran en completa armonía las relaciones fracasan.
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Abril 29
El afán por ser un héroe hace que, cuando no puedas serlo, crees villanos alrededor, creas amenazas inexistentes y vacías, convences a los demás de que la realidad es aquella que tanto relatas... Porque si no eres un héroe, debes ser la víctima... Y eso solo te convierte en un villano más.
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Mayo 16
Dime quién soy hoy, porque supongo que no tengo elección, aclárame cuál es mi papel en la narrativa que te hace quedar bien, me adaptaré al rol, está bien, mi nombre ya fue pisoteado tantas veces que ya ni sé quién soy realmente, eso me ha dado la valentía de cuestionarme, cuando escucho algo nuevo, “siendo honesta, ¿realmente seré esa?”.
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Mayo 30
En la vida real un final abierto es completamente inexistente, simplemente haces algo distinto o continúas en lo mismo.
En la vida real no existen los héroes o los villanos, solo personas que se comportan de manera que te favorece o te perjudica, no por altruismo o egoísmo, simplemente también buscan su bienestar.
En la vida real los problemas no se solucionan con una canción, se solucionan con diálogo y comunicación.
En la vida real no hay un héroe que venga a salvarte cada vez que estás en apuros, aprendes a defenderte, remediar tus errores y cuidar a los que amas.
La vida real es un constante desarrollo de personajes, lo que forja nuestro carácter y personalidad... Eso la hace maravillosa, nuestra evolución constante.
Deja de aferrarte a la ficción y a sus esperanzas vacías, a su “blanco y negro”, la vida real te da una amplia gama de colores y te deja elegir tu favorito.

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Y si... ¿Lo intento?
JugendliteraturAcompaña a Nadia en este viaje de autodescubrimiento, lleno de sorpresas, lágrimas y amor.