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La causa del ataque fue un enjambre de Wyvern hambrientos.

Se dijo que no era raro que los depredadores que sufrían hambre durante el largo invierno bajaran a las cercanías del territorio.

Sin embargo, el daño fue grande.

No sólo se rompió el castillo, sino que también hubo muchas bajas. Una hora después de que Kyle saliera en persona, el refugio aún no se había enterado de ninguna noticia, por lo que solo se llenó de un inquietante silencio.

"Nunca antes había visto un Wyvern así...".

La voz asustada me despertó. A tientas a través de la oscuridad, me apresuré hacia adelante, cortando la brecha entre los lamentos de la gente.

"¿En qué era diferente del Wyvern de siempre?"

"Oh, es el erudito que está cerca de Su Alteza el Príncipe...."

Me apresuré a pedir una explicación.

"Originalmente, Wyvern es un nivel inferior entre la familia de Dragones. Aunque son violentos y se juntan en manada, cazar por sí mismos no es difícil. Pero..."

El hombre tragó saliva y apretó el puño débil y tembloroso.

"Cuando la lanza de los caballeros atravesó el cuerpo del Wyvern... la sangre olía terrible. Y todas las lanzas y el suelo por el que fluía la sangre estaban corroídos".

"¡Y era grande, más grande de lo que se ha visto nunca!"

"El pico también era puntiagudo y afilado..."

Contuve la respiración sin darme cuenta.

Es similar a Wyvern, pero tiene un tamaño grande, y la sangre apesta, e incluso cuando muere, corroe todo lo que toca la sangre.

"Drake..."

Era un monstruo Wyvern de un juego que desarrollé.

Sacando un libro de mi inventario, pase las páginas como un loco. Leí y leí la introducción a Wyvern una y otra vez.

Todo lo que acabo de escuchar es verdad. Aquí no hay un Wyvern. Esta vez de nuevo, se produjo un fenómeno anormal como la cabra del pantano.

"...Ja."

Ja ja ja.

Estalló una risa.

¿Qué diablos se supone que debo hacer? ¿Qué quieres que haga con esta culpa que siento?

*

Afortunadamente, el territorio de Blake era más fuerte de lo que pensaba. Los que anoche temblaban en los refugios, se despertaban al día siguiente limpiándose las lágrimas y comenzaban a reconstruir el castillo.

Eran personas fuertes.

A pesar de que el castillo se derrumbó, las casas se rompieron e incluso perdieron a sus seres queridos, sabían cómo evitar la tristeza. Todos lo hicieron. Eran personas que se esforzaban por vivir el mañana.

Me froté los ojos rígidos y miré a Kyle comandando a los caballeros desde lejos.

Te ves muy demacrado. La perturbación tardó mucho tiempo en calmarse, así que no habrías descansado ni un momento. Te habrías quedado despierto toda la noche. Estoy seguro de que no has tomado ni un sorbo de agua.

Miré hacia abajo las migajas de galletas que quedaron en la palma de mi mano. Lo comí porque tenía prisa, pero no sé cuánto compré durante el caos.

Ahora la cifra milagrosa apenas estaba en el rango del 20 por ciento. Cuando entré en razón, fue después de gastar bastante.

Pero no había manera. No podría haber desaparecido de repente del refugio, y tenía miedo de que Kyle me encontrara cuando terminara todo el alboroto. Así que tuve que hacerlo.

El hámster del Gran DuqueDonde viven las historias. Descúbrelo ahora