🪁1. Wendy

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-Oh no, amigo. ¿Enserio te dejó?... Ehm... ¿Otra vez? - Acaricie su hombro con fines de consolarlo- ¿Por que fue?

-No Kyle. Esta vez es de verdad... No quiero volver a verla... La odio, Kyle... -Dijo antes de levantarse y volver con dos latas de cerveza, dándome una a mi- Me dejó... Me dejó por que decía que no puede salir con un chico que reprueba matemáticas.

-¿Solo por eso? Menuda idiotez -Abrí la cerveza y empecé a beber- Vaya, Blue Ribbon. Tienes los gustos de tu padre.

-Es la clásica. La echo de menos, Kyle. La amo, pero la odio al mismo tiempo.

-Hay, llevas así cinco años. Cada mes hace lo mismo mínimo tres veces, ¿No crees que deberías de decirle "Que te jodan, Wendy"?

-No, por que... -Trataba de pensar en por qué no, pero no quería decirme que era por qué estaba tan acostumbrado a tener ese cariño ahí que quitárselo de golpe sería doloroso, no era por Wendy. - No hay un por que al amor.

-Stan, ¿De verdad la amas? O solo estás asustado de estar solo.

No era la primera vez que le hacía esa pregunta, por que siempre que se lo decía, lo olvidaba por el alcohol. Era la misma reacción de siempre, lloraba y decía que la amaba más que a nada, y que volvería con ella. Pero no fue así esta vez.

-Ya no lo se. He escrito muchas canciones sobre cómo se sentiría este momento, creía que sería doloroso el aceptar que ya no la quiero más, pero al parecer no. Es extraño, ha sido mi compañera de vida desde... Siempre, no lo entiendo.

Mis ojos estaban abiertos como platos, observando esas palabras salir de su boca.

-¿Sabes? Los dos creíamos que corriamos por alguien que ni caminaba, pero realmente los dos estabamos sentados tomando el sol sin movernos.

-Stan, no puedo hacer nada más que aplaudirte por qué te hayas dado cuenta.

-¿Tan obvio era? -Preguntó levantando la vista del suelo-

-Sí. Eras parte de la pareja más larga y tóxica del curso. -Dije llevando mis gafas a la mesa- Estabas tan ciego como yo sin gafas.

-Serás topo.

Antes de que nos diéramos cuenta, yo iba por mi segunda cerveza y el por su cuarta. Aún que yo casi no bebo, de vez en cuando echo algunas con Stan.

-Bueno, creo que deberíamos de dejar de beber ya. - Dije terminando mi cerveza- Que nos conocemos.

-Kyyyyleeeeeee, noooooo. Me sigo acordando de ella...

-No cuela, Stan. Ya sabemos cómo acaba esto, borracho te plantas en tu casa y te cuelas por su ventana. Tienes dos denuncias por meterte en casas ajenas.

-Kyle, el amor es muy ilegal

-Stan, el ilegal eres tú. Eres menor y es la tercera vez que te emborrachas en la semana. Estamos a martes.

-Tú también vas pedo

-Pero yo se comportarme

-Pues bien que tragabas como la perra de la madre de Cartman. Mira, así -Al momento trató de imitar una felación con su mano, mirando hacia arriba-

-Muy bien, Stan. Vayamos a dormir a mi casa. -Aparte las latas de cervezas y le llevé cogido por la muñeca hacia mi casa-

Llevé mi colchón al salón, dejándolo al lado del sofá como siempre que se quedaba Stan a mi casa.

-Así, puedes dormir en el colchón.

-Hay, Kyle. Siempre duermes en el sofá... Llevemos el colchón a tu habitación, dormiremos juntos. Porfiii

-Podrías haberme avisado antes... -Volví a tomar el colchón, esta vez con su ayuda y lo dejamos en el sommier - Bien, duermo contra la pared.

En un momento normal, probablemente, no habría aceptado, pero por algún motivo, sentí la necesidad de hacerlo. Stan se tiró al colchón y se durmió, se veía muy lindo... Kyle. Centrate. Bien, me quité mis gafas y me puse mi gorro de satén para mis rizos. Me tumbe en el lado de la pared y me dormí, pero me desperté en medio de la noche por que tenía mucho calor,  y al girarme me encontré a Stan abrazado a mi. Como tenía tanto sueño, solo correspondí el abrazo y me volví a dormir.

Al día siguiente, me encontré con Stan sentado en la ventana, fumando ahí para no despertarme. Le vi girarse así que cerré mis ojos para hacerme el dormido, y vi como se acercaba a mi y se sentaba a los pies de la cama.

-Oh, Kyle. Que bobo te ves con ese gorro. Te vi por el reflejo dela ventana abrir los ojos, no cuela.

-Siempre me pillas -Dije sentándome en la cama- ¿Tenias frío en la noche?

-Un poco, ¿por que me preguntas?

-Por nada, nada. Apaga el cigarro, o vuelvete a acercar a la ventana.

Me hizo caso y se colocó en la ventana hasta terminar el cigarro. Después se acercó a mi otra vez y se sentó a mi lado.

-¿Te daría asco besarme? -Preguntó de repente-

- ¿Que?

-Si te daría asco besarme. Huelo mucho a tabaco o estoy bien.

-Ahhh... Eso... No, estas bien. Eres besable. ¿Vas a volver con Wendy?

-No, definitivamente no lo haré. Más si soy tan besable.

Se acercó a mi y murmuró tres simples palabras.

-Tú serás Wendy.

Blue Ribbon [Style]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora