-Señorita Ortega -La pelinegra rápidamente corrió hasta donde ella estaba y la tomó con cuidado en los brazos para después acostarla en el sillón, me puse a la altura de su cara y le quite el pelo de cara-
-Mmmm -Murmuró la castaña mientras se movía-
-Señorita Ortega -La movi un poco y ella lentamente abrió los ojos- Dios que susto-
-D-donde estoy? -Hablo en voz baja mientras se tallaba los ojos-
-En la oficina como se encuentra? -La mire con preocupación-
-Me duele la cabeza -Puso sus dos manos en la cabeza-
-Déjeme darte una pastilla -De mi mochila saque unas pastillas y le entregue la pastilla-
-No se tomar pastillas -Susurro mientras me miraba-
-No te preocupes -Tome y la pastilla para empezar a partirla en pedazos pequeños se los pase con una botella de agua y ella logró tomarse los pequeños trozos de pastilla-
-Gracias -Se levantó y trató de caminar pero se tambaleó-
-Será mejor que te sientas -Con cuidado la senté otra vez en el sillón-
-Quiero dormir -Se acostó en el sillón y cerró los ojos-
-Estuviste toda la noche trabajando? -Dije mientras me quitaba el saco-
-Tengo que trabajar para seguir teniendo éxito -Hablo aún con los ojos cerrados-
-Si pero no a ese punto primero esta tu salud
-A quien le importa eso? Ni a mis padres les importo -Se acurrucó en el sofá para después quedarse dormida-La pelinegra con cuidado quito sus tenis y la tapo con su seco y ella la empezó a trabajar en las cosas que tenia pendiente, la castaña duró toda la mañana dormida cuando se despertó no encontró a la pelinegra en la oficina
Pov de Jenna
Cuando me desperté percibí un delicioso aroma abrí los ojos vi que de donde salía ese delicioso aroma era el saco de Vázquez, olía jodidamente bien, me levante y acerque su saco a mi nariz es que dios sí huele jodidamente bien, en eso ella entró por la puerta y rápidamente me quite su saco-Donde andabas? -La mire seriamente-
-Almorzando señorita dove me invito -Sonreí y cerré la puerta de la oficina-
-Mmm bueno como sea ten tu saco -La castaña tiro el saco al suelo- me voy a casa -Sin más tomó sus cosas y salió de la oficina para pedir el elevador, entró y presionó el botón de platan baja para después salir de la empresa se subió a su auto para llegar a la privada donde vivía-Pov de Jenna
Al llegar a casa me di un baño y me acosté en la cama para después abrazar una almohada mientras pensaba en aquel aroma delicioso que tenía Vázquez en su saco no me di cuenta pero una sonrisa se dibujo en mi rostro-Dios que me hiciste Vázquez -Hablo la castaña para que ella misma mientras sonreía en grande en pocos segundos se quedo dormido otra vez-
La castaña durmió casi toda la tarde hasta que el timbre de su casa sonó se quejo en umpalumpa y se levantó de la cama bajo las escaleras para abrir la puerta al ver de quien se trataba se quedó helada
-Que haces aquí? Deberías estar trabajando
-P-papá pasa -Hablo nerviosa mientras se hacia para que su padre entre a la casa-
-Te hice una pregunta -Hablo serio mientras entraba en la casa-
-N[ me sentía bien y me vine a descansar -Cerro la puerta y miro a su padre-
-Descansar? Crees que tenemos tiempo para descansar? Sabiendo la enorme competencia que hay afuera
-Papá me sentía mal -La castaña empezó a jugar con sus manos-
-Crees que me importa? Tu madre tiene razón eres una buena para nada nisiquiera te esfuerzas que decepción -Hablo seriamente para después abrir la puerta e irse-La castaña se quedó parada con un nudo en la garganta rápidamente subió a su habitación y en cuanto se acostó empezó a llorar mientras abrazaba una almohada mientras se preguntaba si era una decepción para sus padres de tanto llorar se quedó dormida, pero por otra parte la pelinegra había acabado con su trabajo pendiente, al llegar la noche la pelinegra acompaño a dove hasta su casa
-Segura que no quieres entrar? -Hablo la rubia mientras buscaba sus llaves-
-No gracias tengo que ir a ver a mi mamá y aparte mañana jueves como no trabajo voy a llevarla a centro de rehabilitación física
-Gustas que te acompañe? -Sonreí mientras miraba a la pelinegra- mañana salgo a la una de la tarde puedo acompañarte si gustas
-Si claro que si me encantaría -Sonreí-
-Muy bien solo pasaba tu dirección y mañana te veo en tu casa -Beso mi mejilla y me dio una pequeño papel y ahí le escribí mi dirección- muy bien linda te veo en tu casa-
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𝓣𝓾 𝓷𝓸 𝓶𝓮 𝓭𝓮𝓳𝓮𝓼
Любовные романыJenna Ortega es una famosa empresaria que tan sólo con 21 años maneja las dos empresas más famosas de Seattle ciudad en Washington, su vida es infeliz desde que era pequeña simplemente no le importaba las demás personas porque así la hicieron sus es...