隔壁的爱 [ NamJin | JinNam ]

N U E V E

Seokjin contempló la pistola apuntando a su cabeza. ¿Boram se había vuelto loca? Parecía haber desaparecido por completo alrededor de la curva. ¿Qué creía que iba a pasar? ¿Dispararle y salir? No podía pensar que iba a funcionar.

Pero por la mirada enloquecida en sus ojos, Boram creía mucho que saldría de allí sin repercusiones.

Seokjin sabía que podía alcanzar su propia pistola. Estaba armado, esto era algo para lo que había sido entrenado si se encontraba con un robo a mano armada. Pero no quería arriesgarse a que le dispararan antes de sacar su arma. Boram parecía que dispararía si él estornudaba en el momento equivocado.

Sobre la mesa, la radio de Seokjin crepitaba y zumbaba. Seokjin la miró antes de volver a mirar a Boram.

—Sabes que si no respondo pronto, mis colegas vendrán a buscarme.

—No llegarán aquí a tiempo—. Boram sonrió. —No cuando buscan a un ladrón que ya ha desaparecido.

—¿Tú lo preparaste?

—Por supuesto. Conozco a alguien que tiene un largo historial. Ella me está haciendo un favor en este momento—. Boram hizo un gesto hacia las cámaras. —No estaba segura de si estarías solo, pero verte aquí sin nadie más fue perfecto.

Seokjin hizo una mueca. Este no era un día para que la mitad de su personal se enfermara. Iba a tener palabras una vez que saliera de aquí. Si salía de aquí.

—¿Qué diablos está pasando, Boram? —Él demandó. —¿Qué estás haciendo?

—Deshacerme de ti. ¿Qué otra cosa? —Boram enseñó los dientes con un gruñido. —Todo esto es culpa tuya, ¿sabes?

—¿Mi culpa?

—Sí, tuya—. Los ojos de Boram parecían salvajes. Seokjin se preguntó si había perdido completamente el control de las cosas. —Me enamoré de Hyunwoo en el momento en que lo vi. Sabía que estábamos destinados a ser. El hecho de que estuviera casado contigo no importaba. Él era mío. Cuando le diste los papeles del divorcio a Hyunwoo, pensé que podría tenerlo todo para mí. Pero luego me dejó. Decidió que tenía una conciencia y me dijo que lo había perdido. ¿Te imaginas cómo se siente al pasar por todo eso y luego me da la espalda?

Seokjin no dijo nada. Decir cualquier cosa habría sido superflua. Boram estaba actuando como si no hubiera pasado por una ruptura con el mismo hombre.

—Me tomó dos años volver a meterlo en mi cama—. Boram continuó sin apenas respirar. —¿Puedes creerlo? ¡Dos años! Pero valió la pena la espera.

—No quiero escuchar esto, Boram.

—¡Vas a escucharlo! —Boram chilló, señalando con el arma en su dirección. —Es tu culpa que esto haya pasado.