Me empezaste a gustar, y me cegó.
Empece a tomar mas en cuenta mis acciones, por que siempre solías estar "un poco" sensible.
Me empece a cerrar en una burbuja, tenia miedo de hacerte enojar, lo cual solia ser bastante habitual todos los dias. Las lagrimas no faltaban todas las noches, con angustia y odiandome por ser yo. Tus amigos te apoyaban, como no, si son tus súbditos.
Empece a ser falso, trate de ser divertido, trate de ser lo mas sentimental posible, llegue a pedirte perdon de rodillas cada vez que algo te fastidiaba de mí. No podías ni mirarme, solo me decías un "Ya esta" y volvíamos a la misma rutina. ¿Te parecía divertido tirarme cosas?¿Te parecía que divertido ver como estaba rodeado de tu basura? A mí no me divertía y te enojaba eso, empezaste a decirme que era amargado y que siempre lo miraba mal.
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Empezaste a gustar de mi, me sorprendio, no me lo esperaba.
Pero estaba feliz, por fin tenia una oportunidad.
Empezamos a coquetearnos, seguías tratándome igual o peor, te habías puesto mucho mas sensible. No contaba que ibas q controlar mas mis movimientos y a la minima pisada en falso, hacias un escandalo.
Dolia, mí corazón sabia que no era mi culpa, pero mí cerebro lo calló. Y termine siendo culpable de un problema que no era mio.
Oh Mark lee, si no hubieras sido tan terco.
