En el reino de Xian Le
gobernaba un joven Omega,
dotado de belleza y valentía
a sus habitantes protegía.
Un día el rey demonio apareció
"Si a su reino quiere salvar...
en la noche de luna roja
a uno de mis hijos
pertenecerá"
Advertencia + 18, actu...
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Mientras avanzaba verificaba no ser seguido por nadie, debía llegar rápido y sin levantar sospechas. Se sonrojó al recordar la linda vista de Yin Yu dentro de su nido y pensar que sus sábanas y prendas formarían parte hacían a su lobo interno aullar de felicidad. Tocó levemente la puerta y esperó la indicación para entrar en aquella cabaña, se escuchó un leve 'pasa' y al entrar sintió escalofríos en todo el cuerpo, no podía creerlo.
Yin Yu era por lo menos cabeza y media más bajo que él y al ser omega tendría una complexión delgada y suave, su piel ligeramente apiñonada pero tersa como la porcelana, firme y sin ninguna imperfección, solo cubierto por su túnica interior daba una vista especial a Yizhen. Sintió su cuerpo rígido, su mente quedó en blanco ante la forma en como el omega estaba sentado esperándolo.
Tragó saliva pesadamente y esperó a alguna indicación del omega.
"Yizhen, ¿lo trajiste?"
El alfa asintió levemente.
"Ven, acércate"
Yin Yu estaba complacido por la reacción del alfa al verlo, extendió ambas manos hacia él esperando envolverlo en sus brazos, sin embargo, el alfa no se acercó al lugar, estaba estático sin quitarle la mirada al omega. Yin Yu se levantó de su nido y caminó hasta el alfa, las feromonas de Yizhen brotaron marcando el lugar, ver aquellas piernas estilizadas, su túnica, aunque le quedaba grande, solo cubría la mitad de los muslos y resbalaba un poco de los hombros dejando a la vista las clavículas y el níveo cuello del omega, su cabello ladeado de forma que sus glándulas aromáticas estarían a disposición de Yizhen para marcarlo.
"Yizhen..." llamó con voz suave, "entrarás conmigo al nido y no debes rechazarme" pasó ambos brazos rodeando el cuello del alfa y acercó su rostro. "Me alegro haber estado consiente hasta este momento..." llevó su nariz hasta el cuello de Quan Yizhen y aspiró su aroma.
"Alfa... por fin estas aquí, por fin podré tenerte para mi" dijo con voz melosa y Yizhen salió de su estupor.
El lobo interno de Yin Yu había tomado el control enviando a lo profundo de su ser su conciencia y ahora le pedía cuidarlo, era instinto natural, no su shixion quien le pedía estar a su lado.