𝔇𝔲𝔩𝔠𝔢 𝔭𝔢𝔠𝔞𝔡𝔬 (JENLISA G!P)

Capítulo 54

"Solo tu y yo, contra todos"

Mientras Mina seguía conversando con el, sabía que sus aprendices no podían morir de esa forma tan cobarde y débil.

- ¿Mina, en realidad murieron?

- Sobre eso... trate de observar si realmente habían muerto, pero Aron me detuvo. Lo más probable es que ellas aún sigan en las sombras.

Con una voz firme solo miraba el retrovisor mientras el seguía en el limbo con esa fachada de cara.

- Qué divertido -sonreir-.

Mientras los traidores seguían en una conferencia, buscando la forma de tomar el mando de la mafia. No esperaron ver en persona al mismo ser quien crío a dos diablas... era ni más ni menos qué, Dokja entrenador y padrino de las hermanas Kim.

- Mierda, Dokja regresó. Mina la fue a recoger al aeropuerto. No podemos echarnos para atrás, hemos echo mucho... necesitamos quitar a esa maldita familia de la organización.

Dudaban de los resultados ya no tenían confianza de lo que esto tendría de resultados, temían que esto no llegara a nada bueno.

- [Finalmente soy el segundo al mando, tengo que conversar con Dokja para que me de el mando de esta organización].

- [No puedo permitir que me quiten mi reinado].

Las personas comenzaron a susurrar pregúntanos por "Aron" el primo quién había apuñalado a su prima. Y el mismo, quién hace la trampa con las hermanas Kim, para atrapar al traidor de Zar.

- Porqué Aron aún no llega, ¿que sucede con él?

Preguntaban con bastante curiosidad, molestando por completo a Zar. La misma persona quién quería el mando de la organización y la cabeza de la traición.

- Dejemos que venga cuando quiera, tenemos cosas más importantes que hacer.

La conferencia había comenzado, todos estaban en una gran discusión para tener el orden, todos querían tener provecho de la muerte de las hermanas Kim.

- Dokja, esta bajando de su automóvil.

Los pasos hacían demasiado eco, todos se habían callado. Sabían que era una persona jodidamente sádica, al grado de poner respeto con su mirada.

Todos miraban con respeto sus paso, hasta que el se sentó.

- Mmm.... este lugar parece estar más libre que de costumbre.

-interrumpir-. No tenemos sucesor Dokja, es demasiado difícil tener un orden si no tenemos un líder ¡cof!

- ¡Ah! Necesitamos un nuevo sucesor alguien quién tenga claro lo que haremos, necesitamos alguien con el cuál podamos confiar.

-Mirar-.

Dokja solo observaba como todos sugería rápidamente al nuevo sucesor, postulando y dando ideas.

- Si no es usted el que va a liderar, por favor denos el poder de escoger a alguien digno.

Un rotundo silencio había nuevamente inundado el lugar. Todos esperaban su última decisión.

- ¿A quien quieren como sucesor?

-Pararse-. ¡¡YO TOMARE ESE LUGAR CON LA VOLUNTAD DE TODOS!! Dokja, porfavor escogeme....

- Está bien, tienes mi aprobación.

- ....?!

- Todo es cuestión de poder y como tener estrategias nuevas, si realmente tienes todas esas capacidades para estos ejecutivos. Entonces puedes ser el nuevo sucesor.

Con una sonrisa de soberbia cubría la gran cara de Zar.

- ¡¡Gracias, gracias, gracias, Dokja!!

La felicidad era muy pronto para celebrar no esperaba la gran entrada de las hermanas Kim.

- Si realmente quieres montar un teatro, te recomiendo que tengas buenos peones Zar. Gobernar a estos pedazos de mierda, sin duda es agotador pero solo yo puedo tener el orden de todo...

-Detenerse-.

- Esa...

- ......Voz.

Con una sonrisa estaba Kim Jennie y Kim Jisoo, sabían como entrar y en que momento atacar de la forma más despiadada. No había nada que estas dos hicieran mal, sabían como manipular las cosas a su beneficio propio.

- ¡¡¿JENNIE?!!

-Entrar-.

- Realmente creíste que iban atraparme uno cuantos oficiales. Aveces los perros deben ser castigado.... Jennie, te parece si comienzas la reunión.

Las caras comenzaban a temblar ver a las hermanas Kim, como si no había pasado nada.

- Qué curiosos Jennie, parece un cambio de sucesor. Tú aún no mueres y yo aún sigo acá.

- Eso es raro Jisoo... para que necesitamos otro sucesor si sigo acá.

- Esto...Esto, no... ustedes están muertas. ¿Cómo es que están acá? ¡algo malo esta pasando.... esto no...!

- Zar. ¿Sabes que aprendí cuando estaba entrenando para ser sucesora? -sonreir-. Hay que asegurarse por completo que el enemigo no esté respirando.

Rápidamente todos estaban delatando a Zar. Eran peor que las hienas, se comían entre sí para dejar al más débil.

- ¡¡Entren ahora!!

Rápidamente habían entrado armadamente, para aniquilar a todos los que no habían espiado sus pecados.

- Si no murieron antes, yo misma quitare esa maldita sonrisa de sus caras Kim, malditas perras... deberían de pedir piedad antes que les tire los sesos.

Rápidamente había muerto uno de los escoltas de Zar. Al punto que comenzó una lluvia de disparos desde una distancia...

- ¿Qué? ¿Quién es ese? ¡¡aún no eh dado órdenes!!

Desde la gran distancia estaba el equipo alfa, quién una vez protegía al gobierno ahora protegen a las hermanas Kim.

-Sonreír-. Si que tienes buena puntería Rosé.

- Ese estuvo fácil, bueno el que sigue...

Rápidamente comenzaron a matar a todos los escoltas de Zar. Dejándolo sólo sin que nadie pudiera escoltarlo.

- ¡¡MIERDA!! ¡¡EN QUE MOMENTO...!! ¡¡DISPAREN!!

- ¡¿Qué hacen?! ... mi unidad élite....

- Zar. Enserió..... así de buena son las personas que preparaste.

- Es patético... fueron muy débiles, ni siquiera me dan lastima.

Uno de los pocos sobrevivientes se habían acercado a Jisoo, pidiendo su perdón.

- Jisoo... gracias por salvarme, ¡¡debemos matar a Zar!! ¡¡Es un traidor!!

Era demasiado terco que aún seguía apuntado con su arma, se sentía amenazado por ellas.

Sabía que había perdido todo.

- ¡¡Maldita sea!! ¡¡Te mataré!!

Rápidamente habían entrado con nuevo refuerzo, mandando a los últimos sobrevivientes quiénes seguían con vida, no iban a permitir que sigueran traicionando a la mafia.

BANG

BANG

BANG

-Agonizando-.

- Malditas hijas de...

-Sonreír-. El refuerzo si que tuvo algo de drama a tu miserable vida, Zar.

Los ojos de Jisoo brillaban con tanta claridad al momento de apuntar con tanta firmeza a Zar.

- Los traidores deben de morir, tu mismo eres su ejemplo. Dale un beso de mi parte a Judas cómo lo haría un Kim....

BANG. . .