•🌙Eclipse☀️ • (Pausada Temporalmente)

03.- My Sweet Flower

Hola...

Perdón si hay incoherencias o faltas de ortografía, llevo mucho sin hacer esto.
A lo mejor no llegue a cuadrar con lo ya escrito pero la edad de Tanjirō se cambió a 23 años.
(Y makomo se agrego al harem).

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Las 2 pequeñas niñas tuvieron una larga estancia en la finca de Tanjirō. Y los pensamientos tan lindos de las niñas sobre "Divertirse" o " Pasarla bien", se Pudrieron. Quizás pudo llegar a ser algo tranquilo después de lo mal que se la habían pasado en aquellos días donde el demonio atacó a su familia. Fue un completo error insistir tanto en quedarse con Tanjirō pensando que serían felices.

¿Se podría catalogar Vivir a eso?, Un arduo y pesado entrenamiento fue el que se ganaron después de insistir tanto en que las entrenará el peli rojo. "El éxito es el fruto que deja el Trabajo duro". Correr hasta desmayarse, blandir la espada 1000 veces sin parar, levantar (o solo mantener) rocas increíblemente pesadas con la espalda, golpear tablones de madera con astillas, hacer lagartijas, abdominales y sentadillas hasta morir, mantener la respiración de concentración total todo el día y claro, practicar las que serían sus nuevas respiraciones, las cuales ayudarían a convertirse en Cazadores fuertes en un futuro.
Fueron algunos de los entrenamientos que Tanjirō obligaba a realizar a las Niñas, ¿Querían hacer algo?, ¿Pues háganlo bien?. Fue lo único que repitió en su mente el peli rojo.
Todos los malditos días fue un infierno, que luego era compensado con comidas increíblemente deliciosas, las suaves camas, las cosas y servicios de luno y claro la compañía del peli rojo, el cuál no era un mounstro, solamente quería enseñarlas bien a combatir.

Aún así y con todo el dolor que las hizo sentir. Se acostumbraron y empezaron a sentir afecto hacia aquel extraño hombre que las salvó de las garras de aquel horrible ser. Pasaron los años y se encariñaron demasiado con Tanjirō.

Aunque el no cambio mucho, seguía poniéndose muy nervioso a la hora de hablar con las Pubertas.
Y era igual de tranquilo y serio, era rara la ocasión en la que demostrará algún sentimiento característico de humano.

Y porfin después de tanto esfuerzo y dedicación las chicas se volvieron Pilares. Los antiguos se retiraron, o murieron, de los pasados el único que había quedado aún presente era Himejima, el cuál seguía manteniendo su misma e incluso más elevada fuerza.
Nuevos pilares llegaron, algunos antes y algunos después que las Hermanas Kochō. Los pilares se conformaban por. Kanae Kochō (pilar de la flor), Shinobu Kochō (pilar del insecto), Mitsuri Kanroji (pilar del amor) Remi Rengoku (pilar de la flama), Izumi Tengen (pilar del sonido), Gyomei Himejima (pilar de la roca), Kiri Tokito (pilar de la niebla), Umi Tomioka (pilar del agua), Nemi Shinazukawa (pilar del viento) Iguro Obanai (pilar de la serpiente) y Claro Tanjirō Kamado, Pilar del sol y la luna. El único pilar en controlar 2 respiraciones.

Las relaciones dentro de los pilares era buena, pero tenían indeferencias aveces y tenian que aguantar el mal humor de algunos/as de ellos, pero todo era tranquilo.

Tanjirō no solía asistir mucho a las reuniones proporcionadas por el Patrón Kagaya Ubuyashiki, pero se encargaba de que por medio de los cuervos le llegará la información al peli rojo, de hecho Tanjirō no tenía tanta cercanía con ninguno de los pilares más que con las Kochō, Kanroji la cuál lo había invitado s caminar algunas veces y a Izumi Tengen la cuál intentaba entablar platicas con el. Y por supuesto Himejima, que ya se sabe cómo es su relación.

Hablando sobre el patrón, era un respeto mutuo pero no hablaban mucho en persona.

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