My prince is on his way - Niall Horan Fanfiction

Capítulo cuatro

Esto es absolutamente genial. Estoy en el coche de Niall Horan. Disfrutando de un concierto privado. ¿Esto puede ser mejor? Lo dudo.

-¿Puedes dejar de mirarme así? -me dijo Niall sonriendo.

-Sí, lo siento. - Bajé la vista. - No todos los días eres el único público de un cantante mundialmente famoso.

Noté como su cara se puso seria.

-¿He dicho algo malo? -él suspiró.

-No. Es que no me gusta que la gente me vea de esa forma. Soy Niall. Solo Niall.

-Sí, lo sé. No puedes hacer como que no eres famoso, porque lo eres. Pero yo no lo decía de esa forma. Me gusta la gente que disfruta de la música y tú además eres bueno en ello. Era sólo eso lo que quería decir.

-Oh, vale.

Si no fuese por la música de la radio que seguía sonando, un silencio incómodo se hubiese instalado en el coche.

-¿A dónde quieres ir por los helados? -rompió el hielo.

-Acabo de llegar a Londres no hace mucho. Si dirijo yo seguro que nos perdemos. Elige tú.

Llegamos a una heladería pequeña en una discreta calle estrecha por la que no parecía que pasase mucha gente. Nos bajamos del coche y entramos.

Observé que la mayoría de las mesas estaban vacías. Nos dirigimos al mostrador

-Bienvenidos a IcyIce. ¿Qué van a tomar? -Niall me miró.

-¿Tú qué quieres?

-Una tarrina de helado de Stracciatella, por favor. -Sonreí.

-Stracciatella para la chica guapa. -Contestó el muchacho cogiendo la tarrina y rellenándola.

Yo me sonrojé por sus palabras, pero aún más cuando Niall me pasó un brazo por los hombros y me acercó a él antes de hablar. Le miré incrédula.

-Y para mí un cucurucho de chocolate, vainilla y fresa. Ah, y si puedes échale virutas de colores por encima.

El chico nos observó por unos segundos y nos dio los helados. Niall no me dejó pagar y me dirigió a una mesa apoyando su mano libre en la parte baja de mi espalda.

-¿Por qué hiciste eso? -Le pregunté cuando nos sentamos.

-No sé de qué me hablas. -Empezó a comer su helado.

-Lo sabes perfectamente. -Dije aguantando la risa.- El chico sólo quería ser amable y ahora se pensará que eres mi novio.

-No puedes ser tan ingenua, Sara. -Un escalofrío recorrió mi columna cuando él pronunció mi nombre.- Es obvio que no estaba siendo sólo amable.

-Bueno, si ese fuese el caso, tampoco me importaría. Era mono. -Dije mirando al chico de los helados. Niall resopló.

-Pero se supone que estás saliendo con Harry.

-Cierto. -Suspiré y me acomodé en el asiento. -Aquí hace mucho calor, ¿qué te parece si caminamos un rato mientras nos acabamos los helados?

-Vamos. -Se levantó y me abrió la puerta para salir.

Íbamos caminando tranquilamente por las calles de esa zona poco transitada.

-¿Puedo probar? -dijo refiriéndose a mi helado.

-Claro. -Sonreí.

Cogí un poco en la cucharita y se lo acerqué a la boca. Pero cuando estaba lo suficientemente cerca se lo estampé en la punta de la nariz.