𝙈𝘼𝙎 𝘼𝙇𝙇𝘼 𝘿𝙀 𝙇𝘼 𝙇𝙐𝙉𝘼 | ❝El amor lo pintan ciego: Porque el que ama no suele ver los defectos de la otra persona.❞
𝙀𝙡𝙞𝙨𝙖 𝙍𝙤𝙨𝙨 una adolescente que no le gustaba llamar la atención. Inteligente, alumna ejemplar, nada sociable, no...
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Los peligros. ─────────────────
ELISA ESTABA ADENTRÁNDOSE AL BOSQUE la tarde de ese mismo día, después de clases, había hecho algo comprometedor y estaba buscando o pensando una solución para no ser vista como una asesina.
Había tenido que salir a cazar, al parecer la gran serpiente come más de lo que debería y eso causa una terrible sensación hacia la chica Ross. Cuando salió a cazar casualmente encontró un cuerpo partido a la mitad, pero su amigo interior le dijo que siguiera y no perdiera el tiempo.
Ahora estaba regresando por que se le había caído un brazalete que le regaló su madre, se cuestionó en su habitación hasta caer la noche, pero al final término accediendo en ir a buscarlo, sería como buscar una aguja en un pajar, pero ella tenía esperanzas de encontrarlo.
—¿Me puedes explicar un poco de lo que somos? —curioseó.
«No eres vampiro, si eso te consuela»
—Valla, que consolación —irnozo— eso ya lo sé, no es como que tu seas un murciélago.
«Somos una especie muy rara, no hay nombre para ello»
—¿Entonces tu tampoco sabes que somos?
«No, ninguno de mis portadores han podido averguiarlo»
—¿Cuantos has tendido?
«Tres»
—¿Tres? —fruncio el seño mientras se adentraba más al bosque con una linterna— creí que dirías unos cien o más.
«Mis portadores suelen vivir miles de años gracias a mí, pero ninguno a aprovechado los años»
Ella se detuvo de golpe.
—¿V-vivire miles de años? —preguntó perpleja.
«Técnicamente, eres inmortal»
Ella miro a la nada unos segundos antes de volver a caminar de nuevo.
—¿Por qué si tus portadores eran inmortales cambiaste de dueño?
«Ellos decidieron dejarme en libertad. Elisa, en caso de que tu tampoco quieras tomar esta responsabilidad, eres libre de hacerlo también»
—¿Por qué lo haría? —cuestionó.
«Bueno, ellos tuvieron demasiados hijos, pero los veían morir y eso era doloroso para ellos»
—No entiendo.
«Veras morir a la gente que amas y no podrás hacer nada»
—Bueno, Elvis la muerte siempre llegará, es lo que le pasa a todos —resto importancia—. Algunas veces son antes, otras veces son tardadas, pero siempre viene.
