CORAZÓN «la leyenda»

Capítulo 01

"LAS PIEZAS DEL PUZZLE"

NARRA ZOÉ.

No recuerdo bien como fue mi infancia. Solo recuerdo que mi padre fue cruelmente asesinado y mi madre me llevó lejos de Francia.

Cambiamos de look y mi nombre a REBECA CÁSERES para que no nos encontraran los mafiosos que asesinaron a mi padre.

No sé por qué nos buscan, no hemos hecho nada malo.

Me corté el cabello y lo teñí de violeta, mi color favorito.

Pasé quince años sin padre y con una madre enferma de cáncer sin cura.

Solo recuerdo que me advirtió de un futuro no muy lejano, de muchos problemas y pocas esperanzas.

Dos días después de haber cumplido mis veinte años murió mi madre, mi peor año de vida.

Antes de morir dejó en mis manos un brazalete. Raro en verdad, siempre lo llevaba puesto.

-Ten hija -me entrega el brazalete con un dije en forma de puzzle ondulado- ¡Cuídalo! -no puede alzar la voz.

-Lo cuidaré -le digo.

-¡Júralo!

-Lo juro.

-Ahora tienes en tu poder algo muy valioso para nuestra familia. Muchos intentarán robarlo, pero no los dejes.

-No lo entiendo. ¿Para qué quieren robarlo si no vale nada?

-No tienes idea de su valor incomparable.

-¡¿Qué es, madre?!

-Es...es... -el fuerte sonido del monitor cardíaco me vuelve loca.

-¡Doctor! ¡Doctor!

Entra rápidamente el doctor en el salón, pero lamentablemente ya no había remedio, mi madre había muerto.

-¡No puede ser! -lloro a su lado mientras intentan separarme de ella y sacarme a la fuerza del salón.

No lo podía creer. Sabía que este momento llegaría, pero no en un momento tan decicibo.

No me quedaba de otra que obedecer a los médicos y salir del salón. Momentos después ví como sacaban ai madre pálida en una camilla.

Corrí a su lado pero no me lo permitieron, creían que sería muy fuerte para mí.

Preparé un entierro digno de una buena madre. No acudieron muchas personas, pero lo importante es que yo estaba ahí.

NARRA THÉODORE.

Mi padre es uno de los más grandes mafiosos de toda Francia.

De pequeño recuerdo cómo asesinaba y trataba mal a sus empleados, y tarde o temprano yo también lo hacía, una herencia familiar.

He cumplido veinte años. Era hora de convertirme en la mano derecha de mi padre, buscábamos las piezas del Puzzle de los siete reinos.

No sabía para que servía, pero obedecía todas las órdenes de mi padre.

-¿Cuál será mi primer trabajo, padre? -le sonrío.

-Rebeca CÁSERES. Tiene una de las seis piezas restantes.

-¡¿Tengo que matarla?!

-Si se opone a darte la pieza de su familia, sí.

-Pero...

-¡Fin de la conversación! -se enoja.

«No voy a matarla, ¿O sí?»

¡Sé cómo es mi padre, pero yo no soy él! Aún así debo cumplir sus órdenes.

Tengo un brazalete de los siete reinos, siempre lo he tenido y no se por qué. Son siete brazaletes idénticos, mismo tallado, misma figura y mismo material.

Tenía un vuelo reservado para las 18:30. Mi padre es rico pero no le gusta que viaje en vuelos privados, cree que lo mejor es escabullirse entre la multitud.

NARRADOR.

Era de madrugada, Théo había llegado Londres muy temprano. Se había alojado en un hotel, cerca del lugar de trabajo de Zóe.

SIGUIENTE DÍA

ZÓE.
Es muy temprano y mi día apenas comienza. Me levanto de la cama, con deseos de dormir. Me dirijo al baño, me encierro en él y lloro por la pérdida de mi madre.

-¡Ya es suficiente! -dice mi mente- Tu madre no hubiese querido que estuvieras así.

-¡Tú qué sabes de mi madre!

-Solo lo sabes tú, soy tu mente.

«¡Genial! Me he vuelto loca»«Estoy hablando sola»

Me comienzo a cambiar de ropa para ir a trabajar. Trabajo en un bar cerca de mi casa.

Estoy lista. Llevo unos lentes de sol fosforescentes, un vestido no muy corto de color dorado que hace juego con mi cabello recortado ya desteñido y normal. Unos zapatos dorados cubren mis pies y mi cartera MICHAEL KORS (MK) es fantástica. Llevo además la pulsera de mi madre.

Salgo de mi casa y comienzo a caminar, no necesito un taxi para llegar al trabajo.

-¡Llegué! -dije a mis compañeros.

-Rebeca, lamento tu perdida -van diciendo de uno en uno.

-no se preocupen, ya estoy bien -miento para no preocuparlos.

-Eso me contenta -dice mi jefe.

Ya había ahorrado lo suficiente para ir a un buena universidad, pero he decidido descubrir por qué el brazalete que llevo puesto es tan importante para mi familia y por qué tiene unas marcas en su parte superior.

Hago mi trabajo de mesera como todos los días. Llevo un vaso de batido a la mesa catorce dónde había un chico vestido completamente de negro y un casco en la mano izquierda.

-Bonito brazalete -pongo el vaso de batido en su mesa- También tengo uno.

-¡¿Cómo?! -le digo- ¡Creí que era el único!

-Pues ya ves que no -me entrega su brazalete.

-¡Es idéntico!

-Pues sí, son siete -lo toma de vuelta- Quiero el tuyo.

-¡No te lo daré!

⊰᯽⊱┈──❊CONTINUARÁ❊╌─┈⊰᯽⊱

En la creación de este capítulo participó Natalia_MedinaG.

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