Capítulo uno.

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Como era ocasional en épocas de promociones los chicos se encontraban apunto de iniciar una transmisión en vivo todo juntos para hablar sobre los recientes teasers e interactuar con sus fanáticos.

Beomgyu había sido él último en llegar disculpándose rápidamente con los del staff que estaban allí esperándolo para poder iniciar. Beomgyu se acercó a las sillas dónde estaban los demás miembros percatandose que el unico lugar libre era junto al mayor del grupo en un extremo.

Malditos. Pensó.

Se sentó junto al mayor y finalmente dieron inició a la transmisión. Beomgyu tenía una tableta en sus mano para leer algunos comentarios hacía los demás miembros o para él mismo, obviamente leía más los que estaban dirigidos a él.

Mientras los chicos hablaban sintió como él azabache a su lado se acercó para también leer los comentarios así que movió la tableta de cierta manera para que Yeonjun también pudiese ver correctamente.

Beomgyu se rió cuando uno de los comentarios insinuaba sobre una pelea entre su loro, Toto, y el erizo de Soobin, Odi, eso dio paso a un debate donde ambos dueños argumentaban porque creían que ganarían sus pequeños hijos.

Beomgyu supo que iba a perder cuando Taehyun se puso del lado de Soobin, así que para no humillarse con los buenos argumentos que tendría él menor decidió quedarse callado.

Volvió su atención a la tableta que ahora era sostenida por Yeonjun, leyendo algunos comentarios en su mente cuando uno le llamó la atención pero solo para molestar al chico a su lado.

- Hyung, dicen que luces realmente como un señor mayor con esa ropa -mencionó con un tono burlesco.

Yeonjun ese día había optado por llevar una camisa junto a un chaleco de lana que estaba muy a la moda, aún sabiendo que el chico a su lado no estaba muy enterado de lo que era estar a la moda no pudo evitar sentirse un poco molesto.

Mirándolo de reojo con el ceño fruncido captó su sonrisa burlona así que dejando la tableta con cuidado sobre la mesa dirigió una de sus manos al muslo del menor apretandolo con fuerza, Beomgyu chilló inclinándose hacía él mientras decía:

- ¡Para!

Sin embargo Yeonjun no le hizo caso aún presionando con fuerza el muslo del menor. Yeonjun no entendía como Beomgyu que era uno de los que más tenía fuerza en las piernas podía ser tan sensible ahí.

- ¡Basta! -dijo Beomgyu con un tono berrinchudo mientras un puchero se plantaba en sus lindos labios.

Yeonjun sonrío y finalmente dejó de apretar el muslo del menor pero su mano permaneció descansando allí.

Yeonjun admiro durante unos segundos el rostro de Beomgyu, percatandose de que sus ojitos estaban un poco llorosos y si no se lo estaba imaginando un sonrojo se extendía por casi todo su rostro.

Su vista inevitablemente cayó en el regazo de Beomgyu y sonrió al percatarse de que tenía un problemita. Beomgyu lo miró y se dio cuenta donde estaban clavados sus ojos así que apretó sus piernas rápidamente pero eso no quitó la sonrisa burlona del rostro de Yeonjun.

Beomgyu se sintió nervioso todo el tiempo, notándose en el temblor que tenían sus piernas, Yeonjun obviamente se dio cuenta porque su mano todavía permanecía en su muslo.

Durante diferentes ocasiones Yeonjun se dedicaba a acariciar o apretar el muslo del menor, disfrutando del contraste que había entre su mano fría y la piel caliente de Beomgyu, porque sí, gracias a que él llevaba unos shorts podía permitirse acariciar la suave piel del menor.

Beomgyu intentó más de una vez que Yeonjun sacará la mano de allí pero nada resultaba, ni siquiera que el mismo lo obligará a retirarla porque él mayor volvía a ponerla en su lugar y le daba un apretón.

Beomgyu odiaba malditamente su elección de ponerse un short ese día, solo quería que Yeonjun no notará lo que le estaba pasando, y no lo lograría si ese idiota seguía tocandolo de esa manera.

Quería chillar y golpearlo, pero más golpearse a si mismo por esa sensibilidad que tenía en los muslos. A veces la detestaba. Detestaba aún más el hecho de que no podía concentrarse en otra cosa que no sea el tacto de la mano fría de Yeonjun sobre su piel.

La manera en la que lo acariciaba era exquisita, pero Beomgyu se sentía sucio pensando de aquélla manera. Y se sentía aún más sucio con la humedad en sus pantalones.

Sabía que Yeonjun solo lo hacía para molestarlo, un toque amistoso de cierta manera, por ello se sentía culpable de la tonta reacción de su cuerpo.

- Beomgyu -el aliento de Yeonjun contra su nuca le envió escalofríos por todo el cuerpo, se volteó rápidamente para enfrentarlo y se arrepintió al instante, estaban cara a cara con pocos centimetros de distancia-. Ya acabamos el live, ¿Te vas a quedar ahí sentado?

Miró a su alrededor percatandose que solo estaban él y Yeonjun en esa habitación, solos allí. Volvió a mirar a Yeonjun quedando cara a cara nuevamente, Beomgyu no pudo evitar mirar el rostro del mayor, específicamente sus labios, se veían tan apetitosos y esponjosos.

¡No! ¿Qué diablos estaba pensando?

Con el rostro totalmente rojo por la inusual situación y sus estúpidos pensamientos, evitó el contacto visual con Yeonjun.

- Uh, sí, creo que debería levantarme. Necesito... aire fresco -respondió con voz titubeante.

Se puso de pie apresuradamente, intentando ocultar su nerviosismo y su otro problemita mientras buscaba una excusa para alejarse de Yeonjun.

Beomgyu se alejó de la habitación, sintiendo un alivio momentáneo al liberarse de la presencia de Yeonjun.

Decidió refugiarse en el ascensor. Se apoyó contra una de las paredes del pequeño lugar, intentando recuperar la calma. La intensidad del roce de Yeonjun lo dejó con un torbellino de emociones confusas.

¿Qué diablos le estaba sucediendo? ¿Por qué le daba tantas vueltas al asunto? Solo era Yeonjun molestando como siempre, no debería estar pensando demasiado en ello.

Thighs » YeongyuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora