❝Taehyung quiere tocar los jugosos, lechosos, esponjosos, suavecitos, redonditos pechos de Jungkook.
El sueño constante en donde se sumerge en ellos le está atormentando cada día, solo ruega por una vez en su vida contacto con ellos aunque sea un r...
Jungkook no era ingenuo, sabía que la mayoría de los chicos en su instituto se le quedaban viendo el pecho, era habitual que recibiría miradas para nada disimuladas, le incomodaba demasiado pero había una en especial que no lo hacía.
La mirada de cierto castaño le causaban miles de sensaciones, sentía su estómago cosquillear y se sonrojaba mucho, simplemente le fascinaba que aquel chico le observará atentamente, la verdad le excitaba. De pronto el toque brusco de su hermano mayor lo sacó de su ensoñación.
—¿Qué quieres Yoongi? —Le habló en un tono hastiado.
—¿A quién mirabas, eh? —Aunque había un pequeño detalle, la violencia que sufría de parte de éste, según para Yoongi era "protección" claramente no lo es, Jungkook nunca podía recibir mensajes de sus compañeros porque su hermano mayor revisaba su celular a cada hora y sinceramente el menor no quería repetir el episodio agresivo de su hermano mayor, uno donde Jungkook recibió un mensaje de un chico invitándole a salir su hermano para nada lo tomó bien, al siguiente día el azabache menor llegó al instituto con notables marcas violáceas y sin teléfono.
—No miraba a nadie —Yoongi observó a los lados, viendo si había alguien por ahí.
—Háblame con respeto, conmigo no uses esos tonos, ¿quieres que te enseñe a ser un buen hermanito? —Dijo mientras apretaba su mandíbula con tanta fuerza.
—P-perdón hyung, por favor, d-duele —Yoongi lo soltó acariciándole la marca que dejo en su mandíbula.
Como odiaba a su hermano mayor, lástima que Jungkook no podía hacer nada, ya que dependía de él y su padre que era una versión más grande de Yoongi, ambos mayores solamente hostigaban la privacidad del menor de la pequeña familia. Jamás le dejaban en paz y ni hablar de todos los golpes que recibía de su hermano.
—Estás perdonado, hermanito —Yoongi le miró todo el cuerpo de manera nada discreta, eso asqueaba a Jungkook demasiado aunque no había algo que pudiera hacer, lo único que tenía que hacer era salir de aquella casa, pero, ¿cómo? Su trabajo de medio tiempo solo podría cubrir necesidades básicas, si se marchaba de aquel infierno que era su hogar, ¿cómo pagaría la mensualidad de la escuela? No le alcanzaba, esa es la razón por la cual tiene que soportar el que su "familia" le mirará como pedazo de carne. —Ya se acerca tu cumpleaños, ¿no?
Jungkook asintió asqueado, aquel cerdo que se hacía llamar su hermano le acariciaba la cintura mientras hablaba en su oreja.
—Tengo el regalo perfecto, esa noche necesito que llegues temprano de tu trabajo, ¿ok?
El menor no respondió, cerró sus ojos fuertemente imaginando a que se refería, hasta ni su hermano o su padre se habría propasado con él aunque era cuestión de tiempo para que pasará, Jungkook ya lo tenía previsto, por esa razón es que estaba desesperado por salir de casa.
—¿Ok? —Yoongi le dijo con voz fuerte mientras lo tomaba de la nuca con fuerza, hundiendo sus dedos en la piel blanca.
—Ok.
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—Eres un idiota, Taehyung —Dijo Jimin.
Habían dos grandes razones por la que Jimin le decía todo el tiempo idiota al estúpido que tenía como amigo y la primera era porque éste le hablaba tan abiertamente de sus sueños húmedos y la segunda (que cabe recalcar qué es la más importante) Taehyung tenía un diario de sus sueños húmedos, lo más asombrosamente pendejo que a alguien se le podría ocurrir, escribir tus sueños húmedos en un cuaderno que además llevas en la mochila del colegio era una barbaridad de aquellas que solo se le puede ocurrir a las personas más imbéciles en la vida y todavía agregarle que todos esos sueños eran sobre Jungkook el chico que todo el instituto conoce, dios mio y para rematar, el diario era firmado con nombre del propietario, en serio que Jimin quería darse de baja de la vida.
—Oh vamos, Jimin, es bueno, me ayudará a mejorar en gramática, ortografía, caligrafía y tú mamá dice que es bueno escribir para desahogarse
—¡Desahogar sentimientos no escribir pornografia infantil! —Taehyung le pegó a su amigo cuando todos voltearon a ver.
—Callate, mierda —El más alto jaló a su amigo a fuerzas, pero como Taehyung es un idiota de primera, olvidó su preciado diario de sus sueños húmedos.
Jungkook había escuchado la última parte de la conversación de estos y tomó el diario de aquel castaño, echándole un ojo a las primeras páginas, eso le dio la idea del millón.
