26/11/2022: MADRUGADA

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Narra Licha:

Los días de convivencia fueron pasando. Nuestro mayor entretenimiento es mirar los partidos de las otras selecciones, tomar mate, limpiar las energías de todos, entrenar, tomar mate, jugar al truco, al chinchon y tomar más mate.

Medio que nos la arreglamos para divertirnos, ya que no podemos salir del complejo de la universidad. Tratamos de dormir lo máximo posible pero, por culpa de los nervios de no clasificar, se hace lo que se puede.

Tiempo actual: Terminamos de comer y cada uno subió a su respectiva habitación. Me cambié, lave mis dientes, hice todas las macumbas posibles en contra de México y me fui a "dormir".

Creo que di más de 20 vueltas en menos de dos horas. Básicamente dormía y a los 10 minutos, me despertaba. Como ya, definitivamente, me di cuenta de que no iba a pegar un ojo el resto de la noche, decidí bajar a la cocina para calentar agua.

Mientras el agua se calentaba, agarre el mate, abrí un paquete de yerba, tire yerba dentro del mate y prepare la pared del mate. Cuando el agua ya estaba caliente, la puse en el termo, lo cerré y me fui al balcón que hay en mi habitación.

Apoye las cosas en una mesita y me senté en el sillón que hay al lado, agarre el termo y comencé a cebar.

¿Que haces despierto a esta hora? - pregunto el cuti asustandome.

AY LA CONCHA DE TU MADRE - respondí prácticamente saltando del sillón por el susto - no tengo sueño, estoy re cagado boludo.

¿Queres que te haga compañía? - pregunto el.

Como vos quieras - respondí cebando mate para dárselo a el.

Yo también estoy re cagado, pero confío en que vamos a pasar - dijo el apoyándose contra el barandal del balcón.

Me puse de pie, caminando hasta estar enfrente suyo, guardando cierta distancia entre el y yo.

Yo también lo creo - dije sonriendo.

Eu, te tengo alto chisme - dijo el sonriendo - a que no sabes quien la puso.

Eso me parecía raro, ya que hoy no eran los días de visitas de las familias.

¿Quien? - pregunte agarrando el mate para cebar.

Resulta que hoy iba por el pasillo del piso de abajo, para ir al comedor a picar algo, pues taurino - respondió el - y cuando iba volviendo, lo engancho al juli saliendo de la pieza que comparte con el Enzo, no sabes culiao, no podía caminar el wacho, parecía que lo habían roto.

Naa, no puede ser boludo - dije - si juli no es putazo, habrás visto mal.

Culiao, si la habitación de ellos es la 214 y el Julian salía de esa pieza - dijo el - no vi mal, además, al rato nos juntamos en la pieza del huevo y el Enzo tenía una re marca en el cuello.

Che, para, ahora que me acuerdo - dije intentando hacer memoria - el otro día, andaban medio raros estos dos, corte medio trolos.

¿Como medio trolos? - pregunto el.

Estaban pegados el uno al otro, en el viaje de Emiratos para acá, Julian estuvo todo el viaje con las dos piernas arriba de las de Enzo - dije medio asqueado - no puede ser que sean putos y jueguen al fútbol.

Cállate, que de seguro vos te la re comes - dijo el cuti - te dan asco los putos, el que se asquea de nosotros, también es puto.

Me jodes que sos trolo - dije totalmente sorprendido - ¿para, como? Si tenes mujer e hijo.

No estoy más con Karen, y que haya estado con ella no significa que no pueda ser medio gay - respondió el - solo tenemos una buena relación por amistad y por Valentino.

¿Y que vas a hacer? - pregunté.

Nada, no le podes decir nada a nadie - respondió el.

¿Pero lo pensaste bien? - pregunte - digo, no es algo que puedas pensar totalmente a la ligera.

Lo pensé desde la copa América del año pasado, medio que me había empezado a atraer un chico y que se yo, preferi investigar bien antes de mandar mi noviazgo con Karen a la basura por una estupidez de momento, nunca probé con nadie pero si entendía lo que sentía por ese chico y eran los mismos sentimientos que, alguna vez, tuve por Karencita - respondió el.

¿Y se puede saber quien ese chico? - pregunte.

Narra Cristian:

Creo que quien es ese chico, es más que evidente. El fideo, ahre no.

No, por el momento, no - respondí.

¿Por qué no? - pregunto el haciendo un puchero, dejando el termo y el mate en la mesita, para poner sus manos en mi cintura.

Basta hijo de puta.

Ni Son me insistió tanto el día que le conté.

Literalmente estaba temblando.

Por que no Lisandro - respondí.

¿Pero por que no? - pregunto el - ¿acaso no confías en mi?

No es que no confíe, pero hoy no tengo ganas de contarte - respondí.

Daaaale, no seas ortiva, que no se lo voy a contar a nadie - respondió el.

¿Y a quien se supone que se lo vas a contar si sos vos el que me gusta? - pregunte.

Rayos.

"Amor, quiero que podamos ser-" - Lisandro Martinez/Cristian Romero.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora