🌟metodología de lo absurdo🌟

☀️17☀️

17.- "la mejor recompensa"

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Un par de horas después...

Las plantas de los globlins y kobolds resultó ser más larga de lo esperado. Giyuu fue utilizando su técnica de bala de piedra para despistarlos y atacarlos con su nichiri. Entre más usaba el elemento de tierra, más fuerte se hacia su ataque, mayor alcance y velocidad en sus proyectiles incluso empezaron a salir más piedras en un solo ataque.

Pero dentro de todo ese triunfo hay sus tropiezos, Giyuu no está acostumbrado a enfrentar a múltiples enemigos a la vez que si no fuera por la barrera de Kyojuro (siendo sincero, la había olvidado) y el mismo Senjuro posiblemente tendría heridas muy graves. Lejos de lamentarse, El Omega se determinó a mejorar su velocidad y defensa.

En cuanto al Slime, seguía derritiendo todo a su paso, dándole prioridad a los que se acercaban a un punto ciego del pelinegro. De vez en cuando recibía elogios del dios del oeste y del Omega por su gran esfuerzo.

Llegaron al quinto piso. El sitio era diferente a los demás. Había una cúpula de roca encima dando una iluminación mucho mayor, con muchos Kobolds, quizás el doble de cantidad que el piso anterior.

- son demasiados - Giyuu afianzo su arma con sus manos. Una gotita de sudor paso por su frente, algo nervioso por la cantidad de enemigos.
- efectivamente... Por la cantidad, puedo asegurar que hay un rey en este sitio.- el alfa prime frunce un poco el seño.
- ¿Un rey? Una especie evolucinada - se responde enfocando sus ojos azules en los enemigos. ¿Estará bien con eso? Vio al suelo, Senjuro se movía impaciente, está determinado a llegar hasta el final.

Como su madre (adoptiva) debía proteger la vida de Senjuro pero no debía impedir su crecimiento. Si es necesario exponerse a un mayor peligro lo haría. ahora que lo piensa, Senjuro está sacando muchas manías de su pareja.

(notita chismosa de Sabito: No Giyuu no es necesario ir a tales extremos pero en este caso está bien y concéntrate como hombre)

- ¡Bien! - no dijo más y se lanzó a atacar a los lobos bípedos con Senjuro a su lado. Kyojuro mantenía su postura neutral desde lo alto viendo como se desenvuelven sus dos seres favoritos. Aunque confía en sus fuerzas y la resistencia de su barrera (osea es una barrera hecha por un dios) no podía evitar sacar las garras de vez en cuando, en momentos que Giyuu se ve rodeado de enemigos o se tropieza por desconocer el terreno. Pero es rápidamente auxiliado por Senjuro.

Después de tantos proyectiles sólidos, ácido y llamas danzando por el terreno, apareció el rey Kobold. Una bestia agresiva enorme de 4 metros de alto, robusto, pelaje con tatuajes azules y un hacha en su garra, dispuesto a eliminar al duo.

La batalla comenzó de forma inmediata, Giyuu se mantenía alerta atacando con sus balas de piedra mientras que Senjuro intenta darle con el ácido pero se movía con rapidez para escapar. El suelo retumba de sus ataques físicos y de vez en cuando los hace tropezar. En algún punto, el omega se separó del Slime y fue acorralado por el rey Kobold contra una esquina.

-!bala de piedra! - sus proyectiles no hacían daño real, retrasando en nada lo inevitable. Gruño en voz baja, no moriria ahí, no dejaría a su pareja y cachorros solos.
- ¡Bala de piedra!! - concentro su magia en un guijarro más grande, del tamaño de un balón de soccer y lo arrojó con fuerza hacia la frente del monstruo. Una gran herida se abrió y lo hizo retroceder unos pasos.

-... - viendo que su habilidad aumento, era momento de acabar con eso con su nichiri.

Una pulsación y su cabeza le empezó a dar vueltas.