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Un baño

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Aquel día siguió siendo igual de largo, yo no soportaba mi propio olor el cual estaba encerrado en aquel estúpido cuarto sin ventanas.

-¡Oigan!- golpee la puerta por séptima ves mientras gritaba, quería tomar un baño pero por algún extraño motivo no caía agua de la regadera que estaba en el pequeño baño.

-¿Qué pedo morra?- pregunto Gabriel mientras abría la puerta

-¿me puedo bañar?- le dije

-pues no se. ¿Te sabes bañar?- me dijo algo confundido

-quiero decir, ¿Puedo tomar un baño?-

-pues no se, tu dime si te puedes bañar-

-ahgg, olvida lo que dije- dije algo enfadada

-al chile yo no te entiendo. Deja le hablo a Toño o al Nata- se fue por unos segundos y después regreso

-¿Cómo vergas no le vas a entender?, Pues ni que hablara chino-

-pues no le entiendo wey-

-¿Que ocupa la princesa o que?- dijo Antonio mientras se acercaba a la puerta

-Me quiero bañar-

-y quieres que yo te bañe o que- dijo Natanael

-nooo, pero-

-no hay pedo, yo te baño- dijo y abrió más la puerta

-dejala hablar, pendejo-

-el agua no sale de esta regadera- dije algo harta

-pues- se quedó pensando Gabriel- puedes usar la de el cuarto del Hassan- yo asentí

-andale wey- dijo Antonio dándole un codazo a Natanael, el me agarró de las manos y me guío hacia arriba

-te voy a dar un House Tour nomás por qué estoy aburrido- dijo- esa puerta es el cuarto del Oscar, el vato ahorita fue a comprar de cenar. Esa puerta es el cuarto del Gabito, esa del Toño y ese es el mío por si quieres un rapidín ya sabes dónde encontrarme- me guiño un ojo y yo rodé los ojos

Caminamos, la casa era realmente grande, tanto el piso de abajo como el de arriba.

-no me interesa- dije, la verdad es que moría de ganas por saber más de ellos. Me gustaba platicar con Natanael, me agradaba su manera de hablar y lo confianzudo que era.

-ay plebe. No seas tan mamona, neta- me dijo con los ojos entrecerrados, yo solo rode los ojos en un intento de evitar una sonrisa

-este es el cuarto del Hassan- entramos y Hassan estaba acostado en la cama, yo aparte la mirada cuando me di cuenta de que únicamente estaba en ropa interior.

-¡No mames Rubén!- grito, Natanael cerró la puerta de madrazo y comenzó a reír

-vamos a entrar, ehhh. Al rato te la jalas- abrió nuevamente la puerta y Hassan ya tenía un short puesto.

-¿Que vergas quieres?- dijo, yo estaba detrás de la pared

-la plebe se quiere bañar- me jaló y yo entre a la habitación.

Hassan lo mató con la mirada para después abrir la puerta del baño

-pasate- me dijo y yo camine hacia allá observando levemente su habitación.

𝙒𝙤𝙪𝙣𝙙𝙨 // H.LDonde viven las historias. Descúbrelo ahora