Capítulo 4: un nuevo día

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Te despiertas totalmente listo para un nuevo día, oyes el sonido de la puerta.

Goldy: ¡ARRIBA HERMAN@! *Se abalanza contra tí*

Tú: Jajajaja, ¡Goldy, para!

Bajan a la puerta de entrada, cuando.

*Bluey salvaje aparece*

Bluey: ¡Buuu!

Tú: wow, estoy aterrorizad@.😒

*Bingo con máscara de payaso aparece*

Bingo: ¡BUUUUUUUU!

Tú y Goldy: ¡AAAAAH!

Bingo: jajajaja, *se saca la máscara*

Salen de la casa, ves un hermoso sol y tú mamá (que de hecho, se llama Sandy) hablando con Chili.

Bluey: ¿que quieren hacer?

Tú: ya sé *vas a tu casa y vuelves con una pelota y una cubeta*

Tú: ¿y si jugamos a lanzar la pelota a la cubeta?

Bluey: mmm...ok

Y así jugaron a lanzar la pelota a la cubeta, pero Bluey no podía lograr ninguna.

Bluey: ay, ¡este juego es difícil!

Tú: no lo es tanto, si te das cuenta, deja que te enseñe una técnica.

Le enseñaste a Bluey una mejor forma de tirar la pelota, hasta que lo logra.

Bluey: ¡Hurra!

Tú, Goldy y Bingo: ¡Hurra!

Cae el mediodía, un olor fuerte a parrillada sale desde la casa de los Heeler

Tú: huele tan bien.

Bluey: si, es mi papá, está haciendo una parrillada, ¿Quieres ir?

Tú: le tendríamos que preguntar a mi mamá

Vas con tu mamá y le preguntas

Tú: ¿Mamá, podemos ir a la parrillada en casa de Bluey?

Sandy: eeeh, no se, *ve a Chili* ¿ellos pueden ir?

Chili: no tengo problema

Bluey, Bingo, Goldy y Tú: ¡Siii!

Se van a la casa de Bluey para la parrillada.

Bluey y TúDonde viven las historias. Descúbrelo ahora