La Mansión [Zerobaseone] [Editando]

La sangre

Después de dejar a la chica durmiendo en la cama, decidimos que Jiwoong se quedaría con ella esa noche, ya que Yujin aún se estaba recuperando y no podía hacerlo.

Mientras reflexionaba sobre lo ocurrido y recordaba lo que Yujin nos había dicho, decidí investigar más sobre su hermano para entender mejor la situación.

Al día siguiente, nos levantamos y vi a los chicos observando cómo Jiwoong no podía apartar la mirada de ella mientras comía. Parece que la había obligado a comer algo antes de marcharse.

Taerae: Hola, ¿cómo estás?

Nayoung: Bien, gracias.

Taerae: Me asustaste cuando te desmayaste.

Nayoung: Perdona.

Yujin: ¿Se irá hoy?

Hanbin: Es lo mejor.

Jiwoong: ¿Te llevarán a casa?

Nayoung: Sí, se lo pedí a un amigo.

Observé a los chicos y me di cuenta de que todos notaban lo especial que era ella. Emitía algo diferente a los demás humanos, pero creo que nadie quería asustarla por lo que realmente éramos.

Después del desayuno, acompañé a Yujin afuera del bosque porque la admiraba.

Ella se despidió de nosotros y nos pidió que agradeciéramos a los demás chicos por todo. Era extraño, pero sentía que nos volveríamos a encontrar.

De regreso en la mansión, los chicos seguían ocupados y yo necesitaba hablar con alguien, así que decidí ir a la biblioteca para hablar con Gyuvin.

Gyuvin: Tú también lo sentiste, ¿verdad?

Lo dijo sin apartar la vista de su libro. Me senté frente a él y me di cuenta de que mis pensamientos eran compartidos por todos.

Taerae: Sí, ella es especial.

Gyuvin: Lo que no entiendo es por qué sentimos que es especial. No creo que sea por el olor.

Gunwook: Dejad de hablar de ella.

Gunwook apareció desde una de las estanterías, con una expresión de molestia. No le caía bien y no lo ocultaba.

Gyuvin: Si no quieres escuchar, lárgate.

Gunwook: Solo vine por un libro. Dejad de hablar de ella, no la volveréis a ver.

Gyuvin: Yo creo que sí.

Gunwook: Estúpidos, me largo de aquí.

Taerae: ¿Tú también sientes que la volveremos a ver?