~Capítulo 13~

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Pov Jisoo




¿Porque se ve tan bien? Tan pequeña e inocente y tan sensual.

Le pongo la mano bajo su barbilla y la levanto, la obligo a mirarme a los ojos, ella está sentada en mi mesa y yo delante de pie, por lo que tengo el control de la situación.

Sonrió al ver sus ojos en los míos y dejó perderme dentro de ellos. No me puedo contener las ganas y le doy un beso, un beso corto, solo nuestros labios juntos por milésimas de segundos.

Mi pequeña abre los ojos y se pone muy roja.
-Tomate- Le digo para molestarla un poco y ella ríe, tan delicada.

- Eres preciosa.

-Rosé: Gracias- dice en un susurro, y madre ya mi cuerpo se altera con esto de una manera diferente a todo lo demás.

-De nada- Pero me gusta mantener mi lado divertido y dominante con ella.

Esos labios me gritan, me piden los míos, lo necesitamos.

Le doy otro rápido beso en los labios, aunque lo que deseo es sentirla durante más rato.

Creo que quiere besarme, pero es un manojo de nervios, creo que ella. Piensa que no veo como juega con sus dedos, pero sí lo veo. Me mira a los ojos y a los labios, como si alguien le hubiera dicho que para insinuar un beso hiciera esto, es tan mona por favor. Me está haciendo pasar un mal momento a mí y todo.

Mi cosita vamos tú puedes, tampoco la forzaré a besarme porque quizá no quiere, será ella quien de el primer paso.

Levanta sumano y recorre mi brazo hasta tomarme la mano, la tiene más pequeña que yo, entrelaza sus dedos con los míos y yo le correspondo, está casi temblando, está muy nerviosa, quizá no es una buena idea besarnos.

Le sonrió para que vea que puede estar calmada.

Quiero decirle que no se sienta nerviosa porque con lo loca que estoy yo de sentir alguna muestra de afecto suya, con qualquier cosa estoy feliz y me da igual si no es un beso profesional, ni todas esas cosas que dice la gente de los besos. Con ella me conformo hasta con su mirada.

Me acaricia el lomo de la mano y le devuelvo las caricias, quiero que vea que no la juzgaré pase lo que pase, que esté tranquila.

Echo un vistazo a nuestras manos unidas y mi sonrisa se amplía, luego la miro a ella.

Rosé: ¿Sabes qué? Te diré la verdad... Quiero besarte, pero no sé hacerlo...- Susurra otra vez.

Quiere besarmeee, eso ya es algo.

-Ey solo tienes que dejarte llevar- La veo más calmada porque al menos puede hablar.

- Eso dice Jen.

Como siempre la animo con mis bromitas.

-Yo te puedo enseñar, como buena profe, ¿no?

La tomo de la cintura y Dios, Jesús Cristo tiene la cintura más pequeña quehe tocado en mi vida.

Mis manos casi llegan a rodearla toda. Que ganas de darle duro.

Ella asiente con la cabeza y me toma del cuello, alguien le enseño eso estoy segura.

-¿Quieres?- Nunca haré nada en contra de su voluntad, lo tengo muy claro.

Ella asiente con su hermosa cabecita.

Sin esperar mucho más uno nuestros labios.
Es un beso tranquilo, ella no se mueve, siento su nerviosa respiración bajo la mía y sus labios están calientes y mojados.

MEET AGAINDonde viven las historias. Descúbrelo ahora