Una loca y típica adolescente.

Capítulo 1

Y aquí me encontraba, llorando en mi habitación como siempre hacia, en silencio sin que nadie –en especial mi madre- se enterara...

-Yo no sé por qué dije eso...-susurre para mí, mientras que mis lagrimas no cesaban- no fue mi intención.

Se preguntaran que habrá pasado para que me encuentre así, ¿verdad? Bueno los que paso fue que...

*flashback*

-¡YO LO DIJE!- grito mi hermana desde adentro de la casa- ¡Y SI TIENES ALGÚN PROBLEMA, DÍMELO EN LA CARA!

Estoy tan enojada, quisiera gritarle todas las cosas que tenía planeado decirle, pero como siempre no se las diría.

-¡DEJEN DE GRITAR! PEDAZOS DE... DE...-dije gritando yo también, y apunto de gritar una palabrota, pero ¡vamos Beth! Prometiste no decirlas- ...DE FRUTAS!

Las tres me quedaron mirando, con enojo y diversión en sus ojos, pero eso me enojo mas, no salió como yo lo pensaba, ¡maldita promesa!

-¿¡MAMÁ NO VES QUE ES EL CALCO DE MARCOS!?-grito mi otra hermana- ES BUENA PARA LOS DE AFUERA, PERO PARA LA FAMILIA ES LO CONTRARIO.

Ah no, AH NO, ella no se atrevió a decir eso, NO SE ATREVIÓ, ¡ya está! Me colmaron.

-USTEDES SON LA MISMA BASURA QUE ÉL, ME ARRUINAN MI VIDA DESDE HACE TIEMPO-largue con un nudo en la garganta; oh vamos ellas me obligaron a decirlo- AL FIN Y AL CABO TODOS TENEMOS ALGO DE CADA UNO, ¡SOMOS HERMANOS! ¿Qué esperabas?

Yo y mi bocota, pero bueno debo defenderme aunque les duela lo que diga, ellas hacen lo mismo conmigo, es injusto.

-Beth cuando mamá y papá ya no estén, solo quedaremos nosotras o sino quedaras sola-dijo Esther con seriedad- no puedes pelearte con tus familiares.

-Sí que puedo, es más cuando sea mayor me iré a vivir a Italia con mamá-dije con cierto enojo que sobrepasaba mis limites- y solo mantendré contacto con Janice.

Dicho eso me encerré en mi habitación.

*Findeflashback*

Desde ese día no les dirigí más la palabra, entre otras palabras, las ignore, ellas se cansaron y no me hablaron más...

Pero bueno, el orgullo ante todo –aunque eso sea malo-.

Bueno ¿a que iba? Ah sí... eso de llorar en silencio, lo hago siempre que lo necesito y no doy más, por suerte nunca recurrí a cortarme cuando estoy realmente mal o en pensar en suicidarme; en realidad hubo un tiempo que sí, pero no me anime y me dije a mi misma que la vida es una y uno hay que disfrutarla al máximo, entonces desde ese pensamiento que tuve hace ya varios años empecé a verle el lado bueno de la vida y disfrutarla todo lo que pueda.

Eran las 13:30 pm y no había almorzado, así que fui corriendo a ver a mi madre para ver que cocinaría de rico.

Si señoras y señores, mi madre cocina EXQUISITAMENTE rico, en especial las patatas fritas.

-Ma-dije alargando la "a"- ¿Qué comeremos?

-Carne con mis famosísimas papas fritas- dijo sonriendo mientras que cortaba las patatas, ella prefiere decirle "papas" porque así lo dicen en el lugar donde nació, ah por cierto ella es de Argentina y al juntarse con mi padre (que es estadounidense) decidieron venir a vivir a España, no sé por qué, simplemente no pregunten.

Se estarán preguntando "¿y esta que tiene de española?" bueno les diré que me mude aquí a los 5 años, yo prácticamente nací en Argentina al igual que mi madre, luego nos mudamos unos años para México, luego nos mudamos para Colombia pero a la semana nos volvimos a mover y fuimos para Ecuador, y por ultimo heme aquí en España.

En resumen estuve 3 años en Argentina, uno en México, una semana en Colombia y otro año en Ecuador, ¡Y no saben cuánto me costó acostumbrarme al acento de todos los países! Dios mío... Que lío de idiomas y acentos ¿verdad?

-¡Yeeeeeeiiii!-grite emocionada abrazándola- hace tiempo que no haces patatas.

-Ya deja de molestar-la mire divertida, porque le había salido un acento medio raro- anda, ve a hacer la tarea si es que tienes.

-¡Que raras eres madre mía! Esos acentos tuyos...-dije alejándome y yendo a mi habitación de nuevo mientras que escuchaba a mi madre reírse.

Bien cerebro, tu no me agradas, yo no te agrado, pero para hacer esto hay que hacerlo juntos... ¿Qué iba a hacer? ¡OU! La tarea cerebro, ¡la tarea! Vamos no seas dormilón.

Después de una hora-si una hora- de hacer lo de matemática fui a almorzar.

Nota mental: decirle a las matemática que ya es hora que se resuelva sola.

-BUEN DÍA FAMILIA- dijo mi padre al entrar a la casa- eso huele a... ¿a patatas fritas?

-Buen día cariño- dijo mi madre sonriendo- si, hice papas fritas.

-Me hiciste un tazón para mi solo ¿verdad?

Reí, mi padre siempre que mamá hacia patatas tenía que hacer un tazón extra para él, ¡y el desgraciado no convidaba cuando uno seguía con hambre!

Mi familia está conformada por tres mujeres, sin incluirme, y un hombre; sus nombres son Janice que es la mayor, Marcos *el innombrable*, Emma y Esther; una familia medianamente grande, pero media destruida...

 En fin, en casa vivían nada más ni nada menos que Emma y Esther, junto con mamá y papá obviamente ¿no?, Con las que estaba enojada y peleada era justamente con ellas dos.

-Provecho-dije y me levante de la mesa para ir a encerrarme en mi habitación, si, todo los días era así, yo encerrada y los demás afuera, hasta a veces comía allí adentro, y para lo único que salía era para ir al baño...

-Gracias-dijeron solamente mis padres.

Y bueno mi tarde se trata de leer libros, y el tiempo se pasaba muy rápido para mi gusto; pero no solo leía también hacía mis deberes y estudiaba si es que lo tenía que hacer.

Mi mundo era mi cuarto... okay...